Pesca
Los pescadores guardan las cañas tras el punto y final a la campaña
Después de siete meses, menos en los ríos no regulados, el balance es positivo
Casi siete meses después (menos en el caso de la actividad en los ríos no regulados), la temporada de pesca en la provincia puso punto y final. Lo hizo con un balance positivo aunque también mejorable destacando el alto número de truchas, la pieza estrella en León, que ha dejado jornadas satisfactorias para los aficionados a la caña y el sedal.
La climatología, que siempre juega un papel determinante, los caudales de los ríos y la población piscícola han ayudado a que a lo largo de buena parte de los meses de la temporada de pesca hayan transitado de forma más que aceptable para los aficionados que tanto en las masas de agua reguladas como en las no reguladas han firmado horas y horas.
La pesca sin muerta también ha ganado protagonismo entre los pescadores en una campaña que sin duda alguna ha recuperado la tranquilidad que no tuvo al menos en los primeros meses en el pasado ejercicio. Y todo para un transcurrir de una actividad que sin duda alguna refrenda su importancia en una provincia que tanto por kilómetros de masas de agua como por número de practicantes es un referente en el ámbito nacional.
Ahora llega a lo largo de estos meses la posibilidad de que los pescadores puedan seguir, aunque en menor medida, probándose con la caña aunque en este caso en los lagos. Será durante unos meses hasta que a finales de marzo del próximo año los ríos vuelvan a abrir sus puertas a otra nueva temporada. Que se espera al menos sea parecida... o mejor que la recién concluida.