«Tenemos que salir de esta racha con nuestro ADN»

El vestuario de la Deportiva lamentó la derrota ante el Real Oviedo, sobre todo considerado que el rival no fue mejor. La autocrítica la encabezó el segundo capitán, José Antonio Ríos Reina, que entendió las palabras de Bolo al término del choque: «Es un enfado y frustración porque en aspectos generales hacemos un partido bueno y en un par de errores por no estar concentrados, que no es acierto del rival, sino fallo nuestro, nos meten los dos goles. Perdemos los tres puntos sin que el Real Oviedo hiciese méritos para llevárselos. Nos vamos todos enfadados como se va el entrenador, cabreados con nosotros mismos porque perdemos sin que el rival fuese mejor».

El sevillano habló también de la mala racha y de las expectativas creadas: «El nivel te lo marcas según los partidos que ganes. Empiezas la temporada, te ves primero y llevas varias jornadas en ascenso y te pones a pensar cosas que no son. Ahora tienes una mala racha y, ¿qué pasa?; ¿ahora no somos los de antes? Tenemos que ir como siempre, partido a partido. Y cuando vienen las malas rachas es cuando se ve a los equipos fuertes, los que saben salir de esa racha y nosotros lo vamos a hacer, porque el vestuario está unido y un vestuario unido sale de esa racha. Es normal que la afición se vea primera y piense en el ascenso. Yo, si fuera aficionado, pensaría igual. Y cuando tienes una mala racha, puedes pensar un poco más negativo. Ella siempre está con nosotros y lo agradecemos. Si no estuviera, nos hubiese costado empatar el domingo. Y dentro de diez días seguro que estará apoyando a muerte».

El sevillano concluyó: «Si tú le preguntas a un jugador de la plantilla si firma estar sexto en la jornada 12, lo firma cualquiera. Yo lo firmo este año, el pasado y diez años seguidos más en Segunda División. Hay que centrarse y salir de la mala racha con nuestro ADN: humildad y trabajo».

Mal concedido

El árbitro del partido del domingo, Eduardo Prieto Iglesias, le dio el gol en propia meta a David Costas y no a Ríos Reina, que fue el que tiró. Esta práctica que se ha instaurado en los últimos años de dar gol en propia meta a cualquier tiro que pegue en alguien (lo más normal del mundo en el fútbol) va a llevar a corromper y alterar todas las estadísticas del fútbol, pues un gol en propia meta sólo puede considerarse cuando un jugador lo mete a propósito o en un evidente intento de despejar y no lo consigue, pero nunca en un tiro que golpee en una barrera o en un jugador, incluso aunque no fuese a portería de forma clara. Sino todos los balones que intentan despejar los porteros deberían ser goles en propia meta y así más de la mitad de los goles de la historia del fútbol serían en propia meta. A Ríos Reina ya le birlaron un gol la pasada temporada que metió él, pero como tu tiro despeinó a un rival, se lo anotaron mal anotado al rival.