Los cuatro genios del ascenso

La Deportiva Ponferradina juntará el jueves 18 de este mes a los custro entrenadores que le llevaron a Segunda División: Argimiro Pérez García, ‘Pichi Lucas’, José Carlos Granero Granero, Claudio Barragán Escobar y Jon Andoni Pérez Alonso, ‘Bolo’. Será a las 19.00 horas en la Uned. En el caso de Granero su presencia se producirá vía telemática, pues está entrenando en China. Ésta es la segunda conferencia que organiza la Deportiva con motivo de los actos del Centenario. La anterior juntó a José Luis González, árbitro VAR de Primera División, y a Raquel Suárez, que esta campaña debuta como árbitro en al Primera División Femenina. Para poder asistir a este acto será necesario inscribirse previamente ante la limitación de aforo existente. Habrá que hacerlo hasta el lunes 15 de 08.30 a 14.00 horas en las oficinas de El Toralín.

Pichi Lucas llegó a la Deportiva como un desconocido. Tanto es así que cuando se dijo su nombre de pila, fue confundido con José Pérez García, que por entonces formaba parte del cuerpo de entrenadores del Real Valladolid. Debutó ganándole 2-1 a la Cultural de Álvarez Tomé (antes, Copa ante el Portugalete). Si bien estuvo más fuera que dentro en noviembre y acabó la Liga con un triunfo en el último mes y medio, superó al Universidad de Las Palmas de Gran Canaria CF y al Alicante y ascendió a la Deportiva por primera vez a Segunda División. Fue destituido a finales de abril del 2007 tras un 3-3 en casa ante el Vecindario.

Granero debutó ganando 1-2 en Ferrol al Racing en agosto del 2009 (antes, empate a uno en Copa contra el Eibar). Hizo a la Deportiva campeona de grupo de Segunda División B por segunda vez y jugó la eliminatoria de campeones ante el Sant Andreu. Tras ganar en Barcelona 0-1, perdió en la vuelta por el mismo resultado. En la tanda de 18 penaltis Ian Mackay -hoy en el RC Deportivo junto al hijo del técnico de Chella- le detuvo a Tarradellas el noveno de su equipo, lo que supuso el ascenso. Pero en la categoría de plata no fueron nada bien la cosas en la primera vuelta y antes de que acabase y tras un 0-4 ante el Numancia, Granero fue destituido.

Claudio fue el único que no debutó con un triunfo en la Deportiva. Fue un empate sin goles en Tarragona ante el Club Gimnàstic, aunque cogió el equipo en la categoría de plata para suplir a Granero (con dos partidos de Nistal de interino por medio) y no consiguió mantenerlo. No obstante, la Deportiva le renovó y empezó en Segunda División B como el resto; con un triunfo ante el Zamora por 1-0. Tras un gran play off como local y jugando un gran último partido fuera, subió ante el Tenerife. Luego estuvo otras dos temporadas completas en Segunda División. En la primera se quedó a un gol de jugar el play off de ascenso a Primera División, mientras que en la segunda el equipo fue de más a menos y acabó sufriendo para salvarse.

Por último, Bolo sigue acumulando números y éxitos con la Deportiva. Un entrenador que es un caso impresionante entre la gente de su gremio, pues en ocho temporadas nunca ha sido destituido, ha estado cuatro temporadas en dos banquillos diferentes y en todas las temporadas, y en ésta parece que no será distinto, ha cumplido o mejorado los objetivos que le había marcado el club al que representaba. No sería ninguna sorpresa que en unos días o semanas la SDP anunciase su renovación.

Bolo cogió a una Deportiva deprimida, la post Terrazas, y la ha convertido en lo que es hoy. Debutó con triunfo 2-0 ante el Burgos CF (al que se mide este domingo) y con un play off casi impecable subió en junio del 2019 al equipo a Segunda División ante el Hércules en su primera temporada en el banquillo. En la siguiente, con más sufrimiento del que parecía que iba a ser, logró la permanencia ante la UD Almería en la jornada 41. La pasada estuvo toda la temporada en la primera mitad de la clasificación y en la actual lleva las 15 jornadas disputadas en puestos de ascenso o play off.