Al Cleba le vale medio tiempo

Un Rodríguez Cleba con dos caras —una inmaculada y otra demasiado errática— acabó aplastando al Unión Financiera (27-43) tras una gran segunda parte que enmendó el exceso de pasividad y las múltiples pérdidas de los primeros treinta minutos. Las leonesas, lideradas por una imperial Mireia Díez en ataque, se desperezaron a tiempo después del paso por vestuarios para sumar dos puntos más en su casillero aferrándose con uñas y dientes al liderato.

Resulta complicado sacar a relucir los errores de un equipo que metió más de cuarenta goles por enésima vez esta temporada, pero lo cierto es que las de Guillermo Algorri no entraron con buen pie al partido. El conjunto asturiano tuvo mucho que ver en ese mal inicio. Con buena defensa y acertadas en ataque, las pupilas de Diego Lafuente cortocircuitaron por momentos a un Rodríguez Cleba irreconocible que si bien no se quedaba atrás en el marcador sí que ayudó a que las locales le planteasen más problemas de la cuenta. Muchas pérdidas y demasiados tiros errados hicieron que en el minuto 10 el Unión mandara 8-7 y que al descanso la ventaja leonesa solo fuera de 15-17.

Pero Algorri aleccionó a las suyas y la mala imagen del primer acto se tornó en un vendaval imposible de detener en la segunda mitad. No es que el Cleba metiese una marcha más, es que tiró de turbo para dejar atrás a las ovetenses en un abrir y cerrar de ojos. Apareció Ania Ramos a la contra y ya nada volvió a ser lo mismo. La extremo se aprovechó de la buena defensa leonesa y de los numerosos pases de Bárbara Seco para abrir un trecho imposible de soportar. El Unión trataba de no descomponerse, pero a falta de quince minutos para el final (20-32) hubiera deseado que la batalla concluyese de inmediato. No fue así y el Rodríguez Cleba, que parecía una apisonadora, se dio un festín anotador aprovechando el tremendo bajón físico de las ayer locales.

Suma y sigue el Cleba, que solo ha cedido un punto hasta ahora.