Becada para el Provincial

Ocho candidatos al podio y cuatro billetes para el Autonómico. Con ese argumento se celebrará mañana el Provincial de Becada en Modino, cita competitiva en la que Adrián Chico parte como uno de los favoritos para subir a lo más alto del podio. Fernando González, José Luis Vázquez, Rafael Álvarez o Raúl parten también con opciones sin descartar al resto de participantes en un campeonato que se presenta con un escenario más que positivo avalad por la más que destacada temporada de becada que se está desarrollando.

Con cuatro plazas en juego para el Autonómico que una semana más tarde tendrá como escenario la zona de las Batuecas en Salamanca y que en su caso también delimitará otros cuatro billetes para el Nacional, la cita provincial se presenta abierta y con un número más que loable de cazadores dispuestos a acertar de la manera más precisa con la becada para optar a un lugar de honor.

BUENA CAMPAÑA

La temporada de becada que se iniciaba el tercer fin de semana de octubre y que finalizará el 31 de enero está transcurriendo en clave positiva. Mejor de lo que se esperaba y convirtiéndose en una de las más positivas de los últimos ejercicios. Más madrugadoras que otros años, el número de estas aves está alcanzando cifras no vistas desde hace tiempo. Y eso para los cazadores se ha convertido en un aliciente.

Un claro ejemplo de alto número de ellas se pudo comprobar hace dos fines de semana con la luna llena y la entrada de la becada a lugares de invernada gracias a los vientos del norte.

Incluso se habla de un número superior al 30 por ciento respectos a otros años en estas épocas.

Si en los últimos años, salvo algunas excepciones se valoraban escenarios favorables, en el presente la situación ha ido exponencialmente a mejor aunque para los expertos y los propios cazadores se debe tener cautela y seguir cuidando que las circunstancias que rodean a este ave no varíen en exceso en el apartado negativo. Y con ello no condicionen su presencia para mal en los años venideros.

CAZA MENOR

Si en el apartado de la becada el panorama pinta bastante bien en este curso, no se puede decir lo mismo en cuanto a la caza a menor a algunas de las piezas más apetecidas como la liebre. En este caso se puede valorar como una campaña bastante adversa, algo que no se esperaba pero que tiene como justificación las enfermedades que están marcando una inesperada mortalidad y con ello la presencia de pocos ejemplares. Bien es cierto que en los años precedentes la situación no era para lanzar las campanas al vuelo. Pero no de tal manera como la actual con unas perspectivas que van encaminadas al pesimismo.

El conejo también se ha visto afectado aunque en una medida menos profunda. Eso sí, en comparación con otras temporadas la actual sale claramente perdiendo.

Y para cerrar el triángulo, la perdiz. Con una presencia desigual el balance en lo que va de temporada de caza menor se puede considerar como aceptable tirando a un bien bajo. Se podía mejorar aunque también en el argumentario positivo se están dando lugares en los que las perchas son bastante productivas para los cazadores.