El mecánico gordonés del campeón del mundo de la F-1

Todo campeón tiene detrás a sus escuderos , aquellos sobre los que forja sus éxitos. En este caso deportivos. Y Max Verstappen, el neerlandés que en Abu Dabi acabó con el reinado de cinco años de Lewis Hamilton en la Fórmula 1, cuenta entre ellos con un leonés, Óscar González . Con él y todo su equipo celebraba en el box del último Gran Premio de la temporada el primer título de campeón. Un éxito del que al menos un pedazo de ‘culpa’ tiene este mecánico de La Pola de Gordón, uno de sus hombres de confianza que en más de una ocasión le ha sacado de algún problema. Entre ellos el del Gran Premio de Hungría del pasado año donde tras un golpe en la vuelta de formación de Max contra las barras protectoras del circuito tuvo que ponerse manos a la obra junto al resto del equipo para en un tiempo récord devolver el monoplaza a su estado óptimo. Fue en menos de 22 minutos. De lo contrario ese triunfo que adorna las vitrinas de Verstappen se hubiera quedado en nada.

Siempre dispuesto a aportar su grano de arena. Siempre preparado para que cualquier parada del flamante campeón del mundo de Fórmula 1 acabe en buen puerto (entre ellas el cambio de neumáticos), Óscar González puede estar orgulloso de haber contribuido en los últimos años a los éxitos del piloto neerlandés . Desde su llegada en 2016 a Red Bull es uno de sus hombres de confianza (Óscar lo hacía precisamente tres años antes).

Y antes de aterrizar en la escudería de las bebidas energéticas también pudo aportar sus conocimientos y grano de arena al buen hacer de Pedro Martínez de la Rosa en HRT en la Fórmula 1 . Y con anterioridad ayudar al también español  Roberto Mehri, en este caso en las World Series.

Nacido en La Pola de Gordón , Óscar siempre tuvo pasión por la mecánica y los coches. De la localidad leonesa se trasladaba con sus padres a Pravia donde su progenitor trabajó en la mina de oro de Belmonte mientras que su madre lo hacía de peluquera. Allí dejaba los estudios a los 16 años para trabajar en un taller. Era el inicio de un camino que se encontraba después con el mejor profesor en la figura de Joan Villadelprat (todo un referente como técnico en Ferrari, McLaren y Tyrell ) en Epsilon. Allí iba a crecer como mecánico durante cuatro años disfrutando de los éxitos de Roberto Mehri (con el que mantiene una gran amistad). 

Posteriormente llegaría a la escudería española HRT para debutar en el ‘Gran Circo’ de la Fórmula 1 . Cuando esta bajaba el telón y con muy buenas referencias hacía las maletas rumbo a Red Bull . Allí ha vivido unos años más que productivos. Primero con el título de Vettel y posteriormente siendo uno de los pilares para que la calidad de Max Verstappen tenga la justa respuesta en la fiabilidad del monoplaza. El RB16B con motor Honda que ha sido capaz de hacer frente y en este caso superar al todopoderoso Mercedes W12 en un campeonato que quedará para el recuerdo del piloto neerlandés y su escudero, el mecánico leonés Óscar González.