Un equipo pensado por arriba

En la jornada cuarta, cuando la Deportiva Ponferradina le endosó 5-0 al Pontevedra, se colaron por la ría rachas de fuerte marejada que apartaron a Milucho del banquillo granate y depositaron a Juan Aurelio Gay. Hasta entonces, los pontevedreses sumaban 4 puntos. A día de hoy, jornada decimotercera cumplida, los gallegos son líderes y sólo han perdido cinco puntos desde que el aragonés lleva las riendas. Gay ha logrado invertir en nueve jornadas todo el cuerpo futbolístico insuflado por Milucho al equipo. De repente, un equipo acostumbrado a la verticalidad malentendida del patadón ha pasado a ser una cadena de elaboración que respeta cada una de las fases del juego. Esto, un conjunto con filosofía de cooperativa, es lo que se encontrará la Cultural el próximo domingo, cuando se cumplan las 17.00 horas. Para lograr esta transmutación, el entrenador granate ha tirado de la tradición del 4-4-2 puro y ha ordenado las premisas: quien tiene el balón tiene el control; mi equipo tiene el balón; luego, mi equipo tiene el control. Con este criterio simple y valiente a la vez, el Pontevedra traspasa el mayor tiempo posible el esférico al campo contrario. Martín Ragg, guardameta argentino de 35 años proveniente del Belgrano, es la primera piedra de la construcción. La línea defensiva del domingo estará formada por Sergio Sánchez en la derecha, Casablanca en la izquierda, y Luismi y el leonés Aláez en el centro. En la sala de máquina tienen los mandos Padín, verdadero motor del conjunto, y Márquez (ex jugador del Betis y Valladolid). La baja de Xaco por sanción obligará a que Santi Domínguez retrase su posición a la banda diestra, mientras que Diego Castro seguirá en la zurda. En la punta de ataque estará Javi Rodríguez (máximo goleador con 8 tantos) y Capi, la novedad con respecto a la alineación de Zamora, hará de enganche.