Ademar insiste en la opción Carlos Molina

El éxodo de jugadores de balonmano que huyen de Ucrania, Rusia y Bielorrusia a causa del conflicto bélico provocado por Putin —así como la expulsión de sus clubes de competiciones europeas impuesta por occidente— ha hecho que el Abanca Ademar redoble sus esfuerzos para incorporar algún jugador siempre y cuando «mejore la actual plantilla», como puntualiza Manolo Cadenas. Uno de los que mejor encajan en las necesidades que tiene el conjunto leonés —sobre todo a nivel defensivo— es Carlos Molina, que esta misma semana logró regresar a España después de sufrir toda una odisea. 

El lateral del Motor Zaporoshye ya fue objetivo marista el pasado mes de enero y ahora volverán a intentar que se sume al equipo. Una operación que no resultará sencilla, sobre todo porque aparecerán clubes con mayor músculo económico, pero desde la directiva ya han anunciado en más de una ocasión que harían un esfuerzo si al final aparece alguien que dé un salto de calidad al equipo. Molina sin duda lo daría, sobre todo en defensa. 

Al margen del internacional español, el técnico de Valdevimbre confirmó ayer a efe que «es cierto que se ha abierto una nueva posibilidad de esta situación tan complicada y por eso hay que estar pendientes de cómo evolucionan los acontecimientos». Cadenas es consciente de que situaciones como las que están viviendo clubes como el Motor Zaporovhye ucraniano o el Meshikov Brest bielorrusopodrían abrir nuevas expectativas para encontrar el jugador que pueda completar la plantilla del Abanca Ademar. «No es fácil porque se trata, en muchos casos, de jugadores que son cotizados y que seguramente encontrarán mejores ofertas económicas, por eso se trata de que encajen en lo que estamos buscando y que además pudieran aceptar las condiciones que se le presentaran», dijo el preparador.