Carlos Sainz asoma la cabeza
El piloto español termina segundo en Canadá e incluso llegó a liderar la carrera durante varias vueltas Verstappen se lleva el triunfo y es más líder del Mundial
El neerlandés Max Verstappen (Red Bull) reforzó su liderato en el Mundial de Fórmula a al ganar ayer el Gran Premio de Canadá, el noveno del año, en el que tuvo que soportar la enorme presión que le metió, especialmente en las últimas vueltas, el español Carlos Sainz (Ferrari), que concluyó la prueba en segunda posición y, con una sensacional actuación, marcó la vuelta rápida en carrera.
Verstappen, de 24 años, logró su sexta victoria del año al ganar en el circuito Gilles Villeneuve de Montreal por delante de Sainz, que firmó su undécimo podio en F1; y del séptuple campeón mundial inglés Lewis Hamilton (Mercedes), tercero en una carrera que el otro español, el doble campeón mundial asturiano Fernando Alonso (Alpine), acabó séptimo; y en la que abandonó el mexicano Sergio Pérez, compañero del líder y que, no obstante mantuvo el segundo puesto en el campeonato.
Un día después de que Alonso —segundo en parrilla y perjudicado ayer domingo por un ‘virtual safety car’ y otro coche de seguridad «normal»— brillase bajo la lluvia en la calificación, fue su compatriota Sainz el que puso en serios apuros a la joven estrella neerlandesa; que, superada la presión que le metió el talentoso piloto madrileño, firmó su vigésima sexta victoria en la categoría reina, la primera en Canadá.
Verstappen lidera ahora el Mundial con 175 puntos, 46 más que ‘Checo’ y con 49 sobre el monegasco Charles Charles Leclerc (Ferrari), protagonista de la remontada del día, al arrancar decimonoveno y acabar quinto. Por detrás del otro Mercedes, el del inglés George Russell; y delante de los dos Alpine, en una carrera en la que el francés Esteban Ocon mejoró un puesto a su compañero español.
Intratable al firmar su decimosexta ‘pole’ en la categoría reina, Verstappen partía primero en Montreal; donde —tras exhibirse en la lluviosa calificación, que acabó segundo— Alonso volvía, diez años después, a una primera fila de una carrera de F1. Sainz arrancaba tercero, desde la segunda hilera, al lado de Hamilton —cuyos siete triunfos en Canadá no supera nadie y que este domingo firmó su segundo podio de la temporada—; y por delante de los sorprendentes Haas, que habían sido quinto —el danés Kevin Magnussen— y sexto —el alemán Mick Schumacher en la cronometrada principal.
Verstappen se encontró de esta manera con una oportunidad única de cimentar una ventaja que le permita festejar su segundo título seguido. Y no desaprovechó la ocasión, redactando su declaración de intenciones justo después de que Sainz —cuya primera victoria en F1 se está cocinando a fuego lento— le hiciese sudar en la bella pista situada en la isla artificial de Notre Dame, que baña el río San Lorenzo.
El nuevo ídolo deportivo de los Países Bajos salió bien y Alonso aguantó hasta la tercera vuelta, en la que lo superó, como era de esperar, su compatriota Sainz; por lo que el doble campeón mundial asturiano rodaba tercero —compartiendo intereses con el anterior—, por delante de los Mercedes de Hamilton y de Russell, que había avanzado tres puestos y ya era quinto.
En el noveno giro se ‘ahogó’ el Red Bull de ‘Checo’, que completó un fin de semana lleno de desgracias y acabó su actuación a causa de una avería que parecía de motor, pero que oficialmente fue de la caja de cambios. Victoria para Verstappen.