La Vuelta lleva al mundo la montaña del Esla

Cistierna despedía a la Vuelta a España en 2018 en una etapa que partía rumbo a la vecina Asturias. Cuatro años después esta localidad de la Montaña Oriental volverá a vibrar con el paso de los ciclistas para abrirles de par en par los brazos, como bien anfitrión, a la llegada de la séptima etapa de la ronda ciclista. Lo hará tras un recorrido de 190,1 kilómetros, sinuoso y con la ‘trampa’ del puerto de San Glorio en el 125 para definir a los candidatos a entrar a formar parte del selecto grupo de elegidos que cuentan con su nombre grabado en el palmarés de la carrera. Y ahí estará Cistierna luciendo sus mejores galas para poner punto y final a una jornada en la que el ciclismo mundial tendrá los ojos puestos en la localidad, en su conjunto arquitectónico y en las miles de personas que disfrutarán de una serpiente más multicolor que nunca que sobre las cinco y cuarto (si el pelotón mantiene el paso esperado) dejará su estela en ella.

Evenepoel, que ayer se vestía de líder de la carrera tras su faena de aliño y ataque en la primera reválida con la alta montaña y el final en Pico Jano, Enric Mas, el líder del Movistar que después de su mala experiencia en el Tour parece que vuelve a ser aquel ciclista que en su día Alberto Contador apuntó como su sucesor, el ‘tri’ campeón Roglic que después de ceder ayer algo más de un minuto mantiene intacta su vitola de favorito para pasar a ser ‘tetra’ , Alejandro Valverde n la Vuelta de su despedida, el ecuatoriano del Ineos, Carapaz, damnificado ayer con más de dos minutos de pérdida con Remco y Enric, el ‘Astana’ Miguel Ángel López, Simon Yates, Jai Hindley (ganador este año del Giro) y algún peso pesado más ‘aterrizarán’ con sus bicicletas en la Montaña Oriental leonesa en una jornada en la que salvo que alguno de ellos decida que el ‘castigo’ no fue suficiente en la etapa del jueves y que las dos que sucederán a la de Cistierna tampoco pasando al ataque, se espera que los segundos espadas o algún primero ya descartado para la general puedan forzar una escapada que les permita luchar por la gloria.

Esa circunstancia llevará posiblemente a tempraneros ataques para confeccionar una fuga que por San Glorio comprobará si puede tener opciones de evitar que los sprinters se salgan con la suya. Algo factible edado el terreno sinuoso y dicha cota que a buen seguro descartará a casi todos los velocistas. Luego llegará la hora de la verdad en una Cistierna que espera con los brazos abiertos a la Vuelta situando nuevamente a la provincia leonesa en el libro de ruta de la carrera. Y nada menos que decidiendo el ganador de una etapa.