CAZA Y PESCA
Arranca la temporada de caza menor en León con incertidumbre
Levanta el domingo el telón con la perdiz y el conejo con cifras aceptables mientras que la liebre ofrece una perspectiva deficiente. En la caza mayor el jabalí manda
La temporada de caza menor en Castilla y león levanta el telón el próximo domingo 23 de octubre. Y lo hace con unas previsiones marcadas por la irregularidad. En León la situación se presenta parecida a la de los últimos ejercicios aunque si cabe en el caso de la liebre con una mayor preocupación dada la escasez de rabonas. Era algo previsible pero la situación incluso puede ser peor que la esperada.
Conejo y perdiz, otras dos de las piezas estrella para los cazadores aparecen con un escenario más positivo aunque como sucede en estos tiempos, marcado por la diferencia entre unos lugares y otros de la geografía leonesa.
Con miles de cazadores dispuestos a afinar su puntería, la caza menor tuvo en parte su mejor termómetro con la media veda de fechas pasadas. Y esta no fue en nada positiva.
Tres meses por delante
La temporada de caza menor va en este ejercicio del 23 de octubre al 25 de enero de 2023
Ahora tocará comprobar si esas sensaciones y escenarios se vuelven a repetir. Bien es cierto que la codorniz no aparece entre las especies ‘cazables’ para estos casi tres meses de actividad. Sí lo hace su ‘hermana’ la perdiz aunque en este caso con una mejor predisposición. Es cierto que se han visto bandos numerosos a lo largo de las pasadas semanas.
Y ahí puede asentarse una perspectiva positiva de su presencia en una parte de la provincia. No va a ocurrir así en toda la geografía leonesa aunque a los que les ‘toque’ por su zona pueden disfrutar de su pericia y puntería para cobrarse alguna pieza.
Las precipitaciones caídas a lo largo de los últimos días, aunque ciertamente un poco tarde, también pueden ayudar. Y es que en toda actividad cinegética no hay que olvidarse que junto a diferentes condicionantes, el entorno aparece como uno de los más determinantes. Para la perdiz o cualquier otro animal.
Es el caso del conejo que aunque no está viviendo sus mejores años sí presenta un número que pueda ayudar a los cazadores a sacarse la espina de la falta de liebres.
También la paloma torcaz tiene cierto protagonismo en esta temporada que levantará el telón el día 23 (lo bajará el cuarto domingo de enero, el día 25). Y en este caso se puede decir que por número la situación es más que favorable. Hasta el punto de que en algunos casos se han visto bandos de casi un millar de ejemplares llegando a ‘adueñarse’ de algunos espacios urbanos.
Tampoco hay que olvidarse de la modalidad de caza de liebre con galgo. Y como se apuntaba para esta rabona su escasa presencia ha llevado a que este tipo de caza haya visto como en sus primeras jornadas (empezaba el 12 de octubre) los ceros y la decepción hayan sido la tónica dominante.
Caza mayor, a escena
En lo referido a la caza mayor el jabalí sigue copando un escenario en el que su número es más que destacado, para beneficio de los cazadores.
El corzo también aparece entre otra de las preferencias con datos más que aceptables. Cabe destacar también que en algunos lugares el venado ha ido colonizando espacio. Antes no se veían en algunas zonas y ahora su presencia ya es una realidad.