Semana de copas para Ademar

Semana importante la que se le presenta al Abanca Ademar, quien en apenas cuatro días se jugará el futuro en la Copa del Rey y la posibilidad de plantarse en la final de la Copa Asobal que desde el sábado echará a andar en el Palacio de Deportes con Granollers, Cuenca y Barcelona como parte del espectáculo. Todo con una buena de parte de la plantilla tocada por las lesiones y la baja de larga duración de Boskos tras fracturarse con su selección el primer metacarpiano de la mano derecha. Tampoco bajan las aguas tranquilas en el banquillo, con Manolo Cadenas ratificado por la directiva, pero la advertencia pública de que su futuro no está garantizado ni a corto, ni a largo plazo.

Sea como fuere el cuadro ademarista tan solo quiere pensar ahora mismo en el presente más inmediato. Y la primera piedra en el camino llega este miércoles con la última ronda antes de la final a ocho de la Copa del Rey. Será frente a Anaitasuna en Pamplona, un rival siempre complicado y cuyos duelos con los leoneses se han convertido últimamente en una batalla campal como ya ocurrió hace tres jornadas en la capital.

Meterse en la fase final copera se antoja imprescindible para un Abanca Ademar que desea clasificarse para la próxima edición de la Liga Europea de Balonmano. De no hacerlo vía Liga contaría con una remota opción en Copa del Rey si alcanza la final. No clasificarse supondría un golpe duro para los intereses del club en una temporada que por ahora está siendo muy irregular.

Para preparar este partido Cadenas tan solo contará con dos entrenamientos —hoy y mañana— en los que ya se sumarán los jugadores internacionales que han participado en diferentes torneos con sus respectivas selecciones.

Más allá del miércoles, el siguiente compromiso pasa por las semifinales de la Copa Asobal contra Granollers. Un torneo venido a menos donde el único aliciente es pasar a la final, en la que salvo sorpresa mayúscula estará el Barcelona. El Ademar organiza la competición y se verá obligado a hacer un buen papel el sábado en el Palacio delante de su público. En otro escenario no habría presión añadida, pero al ser en León intentarán darle una alegría a sus aficionados.