Alcaraz desarma a Sinner y peleará por Indian Wells
Carlos Alcaraz tiene al alcance de su mano el número uno del mundo y conquista el torneo de Indian Wells, el conocido como quinto 'Grand Slam' y uno de los más preciados del mundo. Pasada la medianoche en España, el murciano desarmó a uno de sus rivales contemporáneos, Jannik Sinner (7-6 (4) y 6-3), para superar su barrera de las semifinales en el desierto de California y disputar su primera final aquí. Le esperará el invencible hombre de las 19 victorias consecutivas, Daniil Medvedev.
Alcaraz, a sus 19 años, aspira a convertirse en el cuarto español en categoría masculina en ganar en Indian Wells, tras José Higueras (1983), Alex Corretja (2000) y Rafael Nadal, que lo ha logrado en tres ocasiones (2007, 2009 y 2013).
Y está en esa posición porque supo reponerse de todas las adversidades a las que le empujó Sinner, un hombre que le ganó en dos ocasiones, incluyendo un doloroso Wimbledon 2022, pero que aún tiene la herida abierta del pasado Abierto de los Estados Unidos, cuando el español le levantó una bola de partido.
Esta vez la situación no fue tan crítica, pero sí que el de San Cándido rozó el primer set con los dedos y se marchó en blanco. Remontó un 4-2 en contra hasta el 4-5 en el que estuvo con 15-30 a dos puntos del parcial. Pero lo peor llegó más tarde, cuando en el 5-6 Alcaraz desactivó una bola de set para el italiano tirando de dejada y volea. Riesgo, sí, pero recompensa también.
Fueron unos minutos de pánico para Alcaraz, que perdió el control de su derecha y dejó que fuera Sinner el que dictara. Hasta que un 'tie break' nervioso y resbaladizo, en el que la mente tiró más que el brazo, igualó primero y decantó más tarde el set y el encuentro.
"Dite: "Quiero jugar", le gritaba Juan Carlos Ferrero desde el banquillo y Alcaraz mantuvo a raya los ataques de Sinner hasta que pudo pegar el mordisco a partir del 4-4 del desempate. No fue un 'tie break' brillante, pero Alcaraz se sostuvo y en su primera pelota de set se fue hacia adelante. Revés cruzado en movimiento y ganador.
Los números, 14 golpes ganadores y 23 errores no forzados, demostraron que había mucho espacio para la mejoría y eso lo sabía Ferrero, que instó a su pupilo a que, con 1-0, apretara al italiano, a punto de desmoronarse.
"Pon toda la carne en el asador en este juego al resto", dijo el "mosquito". Y ahí, en el juego más largo del partido, Alcaraz asestó su golpe definitivo. Tras salvar dos ventajas del transalpino para el 1-1, quebró su servicio y se empezó a divertir.
El número 1, más cerca Para muestra, el tiro con el que selló el 3-0. Uno de los puntos del torneo, con bote pronto, volea salvada a bocajarro, gancho de espaldas y globo ganador a la línea. Una poción de efectos y cabriolas que aplanó a Sinner, cuyo lenguaje físico apuntaba ya a una derrota. Una de las mejores rivalidades del momento ya se balancea a favor de Alcaraz.
El rival de Alcaraz en la final será Medvedev, que alcanzó las 19 victorias consecutivas tras derrotar a Frances Tiafoe (7-6 y 7-6). El ruso, campeón esta temporada en Róterdam, Doha y Dubai, disputará su séptima final de Masters 1.000 después de un rocambolesco partido ante el estadounidense en el que necesitó ocho bolas de partido para cerrar el triunfo.
Será el segundo duelo entre Medvedev y Alcaraz después del que disputaron en la segunda ronda de Wimbledon 2021 con victoria sencilla para el de Moscú. De ganar a Medvedev, el próximo lunes Alcaraz volverá al número uno superando a Novak Djokovic.