Esperanza para la media veda
Los cazadores esperan un escenario mejor que los últimos ejercicios, en especial en el caso de la codorniz El conejo se presenta como la pieza con mejores perspectivas
La media veda levantará el telón el próximo 15 de agosto en la Comunidad. Un día ya subrayado por los cazadores cada año. Y lo hace con cierta esperanza por parte de estos, esperando que los malos augurios y desarrollo de los últimos ejercicios no se trasladen al actual. Al menos en el caso de una de sus piezas estrella, la codorniz.
Hasta el tercer domingo de septiembre (día 17) la media veda servirá para calibrar también la situación de un ave como la codorniz que no ha tenido un buen paso en los años más cercanos. A priori y por lo comprobado sobre el terreno se puede decir que ejemplares hay, aunque de una manera irregular dependiendo de la zona que se trate. La fluctuación con una población flotante también se está haciendo latente a lo largo de los últimos meses con semanas en las que se pueden apreciar en una cifra más que aceptable y en otras en las que parece que han buscado otras latitudes.
Su presencia es por tanto variable aunque se esperas que las cifras mejoren la de los últimos años en las que dar con una codorniz era una empresa a veces complicada. Y más poder acertar para llevarse un ejemplar a casa.
La escasez de otras temporadas parece que no se va a producir en esta. Y eso es bueno, aunque tratado de una manera razonable. O lo que es lo mismo, no para tirar cohetes pero sí para al menos salir al campo con cierta ilusión de otear y poder dar caza a algún ejemplar.
Por lo que respecta a otra de las ‘estrellas’ de la media veda, en este caso el conejo, la situación se presenta bastante mejor. Tampoco con cifras de ejemplares a nivel poblacional para alcanzar el sobresaliente pero sí un aprobado alto que puede tornarse en notable. Las enfermedades que han afectado a su índice poblacional en ejercicios pasados parece que en este no cuentan con presencia destacada. Algo que sirve también para atisbar poblaciones más numerosas. Aunque eso será ya sobre el terreno y con unas condiciones que se espera puedan mejorar en cuanto a lo climatológico a lo largo de las próximas semanas.
Y es que si el frío no resulta el mejor acompañante para codorniz o conejo el excesivo calor tampoco es lo recomendable. Y a lo largo de las últimas semanas las los termómetros están superando los 30 grados con diferentes olas de calor.
Un panorama que no ayuda y que con la sequía como resultante tampoco convierte estas perspectivas en las mejores posibles. Eso sí, razonables para que en el inicio de la media veda el próximo 15 los cazadores salgan al campo para intentar cobrarse alguna pieza. Codorniz, conejo u otras menos ‘atractivas’ pero también incluidas en el catálogo como la urraca, la corneja y el zorro.
Por delante casi cinco semanas para comprobar si esa esperanza de que la situación pueda revertir a positiva en casos como el de la codorniz está ahí. Y también de que esta pueda asentarse e el tiempo teniendo en cuenta que para ello son varios los condicionantes que deben producirse.
Luego llegará la temporada de caza menor. Pero antes todo un termómetro para calibrar la situación con la media veda que levanta el próximo martes el telón.