España se baja del tren en el Mundial
Canadá y un último cuarto desacertado condenan a la eliminación a los de Scariolo
España estuvo muy cerca de tumbar a la de Canadá, una de las favoritas a levantar el trofeo, pero cayó derrotada (85-88) en un partido a vida o muerte que se decidió en los últimos compases del último cuarto y que dejó a la actual campeona fuera del Mundial 2023. Es la primera vez que el equipo español no accede a los cuartos desde que el Mundial se disputa con este formato.
Justo en la fecha en la que hace 17 años ‘La Familia’ levantó su primer Mundial, España se volvió a encontrar en una ‘final’. Anticipada en esta ocasión. Por momentos soñó y por momentos lo mereció. Luchó hasta el último segundo con un triple de Álex Abrines que silenció el Indonesia Arena de Yakarta. Pero el talento de Canadá se impuso y se coló en los cuartos de final.
El duelo a vida o muerte comenzó, como no podía ser de otra manera, más que igualado. España se llegó a colocar 16-10 arriba con Juan Núñez como base titular. El madrileño exhibió personalidad para subir la pelota, para encarar y filtrar. Aire fresco para los momentos en lo que los de Scariolo se atascaron, que fueron varios ante una Canadá que, a la mínima, hizo daño.
Sin apenas esfuerzo recortó esa ventaja y se puso uno arriba (18-19), pero apareció Alberto Díaz desde la línea de tres para que el primer envite acabara empatado (21-21). Igualdad máxima. Empezó fuerte el segundo ‘La Familia’. Con Santi Aldama como protagonista. Garuba fue otro de los que dejó su sello en la pista. Enérgico como el que más, fue fundamental en defensa para cerrar el aro español. Y España se fue al descanso con 10 puntos de ventaja (48-38).
Pero quedaba mucho partido. Y Canadá tenía mucho que decir. Respondió rápido la selección de Jordi Fernández y en el ecuador del tercer cuarto la ventaja española había desaparecido (52-52). Volvió a empezar el partido. Momento para los valientes. España se desmelenó y se fue de 12 a falta de 10 minutos (73-61). La ventaja no amainó el derroche de juego de ambos combinados. Canadá no se rindió y, aunque más errática de lo que debiera en esas condiciones, volvió a engancharse. Aprovechó la poca producción española y se llevó el gato al agua.