La lesión de Igbekeme le mantendrá fuera de combate durante lo que queda de 2023
Si tras el partido ante el Rayo Majadahonda se conocía que la lesión de Brais Abelenda era una rotura muscular y que le iba a mantener fuera de combate no menos de un mes, con lo que era casi seguro que ya no pisaría el campo de juego hasta inicios del 2024 -salvo recuperación muy rápida-, ahora sabemos que James Igbekeme se encuentra en una situación muy similar. Sufre una rotura de fibras que le va a tener ausente también por un mes. Por tanto, no volvería a jugar en el 2023 y si no está a punto para el duelo del 3 de enero ante el Arenteiro, ya no lo veríamos hasta el 14 de ese mes en Logroño, y en el Toralín, hasta el 28 de enero.
En el entrenamiento de ayer volvió a faltar Ale Díez y Soto empezó a meter intensidad a su proceso de recuperación, pero no estará en Donosti. Un día más Pol Llonch volvió a ejercitarse con normalidad y si no hay contratiempos en los entrenamientos de hoy y mañana, estará disponible para el domingo.
POSIBLE CAMBIO
No da muchas pistas Íñigo Vélez de Mendizábal entre semana de lo que va a hacer al final de la misma en los partidos. Mezcla jugadores y demás, pero en los dos equipos que dispuso ayer para jugar entre ellos colocó cuatro defensas en cada uno. Quizá el preparador vitoriano medita cambiar a un sistema con cuatro zagueros como hizo en las diez primeras jornadas, en las que alternó de salida en los partidos el 4-4-2 con el 4-2-3-1.