La Real quiere aprovechar el factor campo para ir a la final
Una final al alcance de las manos. Es lo que piensan Real Sociedad, que recupera a Mikel Oyarzabal, y RCD Mallorca ante el encuentro de hoy —21.30, en La 1 de TVE—, la vuelta de las semifinales de Copa del Rey que se disputará en el donostiarra Reale Arena tras el empate a cero de la ida. El conjunto txuri urdin no llega en su mejor momento, de hecho, atraviesa una clara sequía goleadora y de resultados desde hace dos meses aproximadamente, pero es ahí donde entra en juego el factor emocional y la Real cuenta con la ventaja de jugar el partido a vida o muerte arropado por su gente.
La empresa no será nada fácil para los realistas. A la mala dinámica goleadora, se le suma la sensible lista de bajas que se acumulan en la enfermería de Zubieta: Álvaro Odriozola, Aihen Muñoz, Aritz Elustondo, Ander Barrenetxea y Carlos Fernández. La nota positiva de la jornada la marca un Mikel Oyarzabal que ayer volvió a los entrenamientos, ha entrado en la convocatoria de Imanol Alguacil y podrá jugar ante el conjunto bermellón. Queda la duda de saber para cuántos minutos estará disponible. También han entrenado con normalidad Arsen Zakharyan y Hamari Traoré, por lo que los golpes del viernes pasado ante el Villarreal quedan en un susto.
Un partido nuevo
El Mallorca mantiene vivo el sueño de clasificarse para disputar su cuarta final en la historia en la Copa del Rey.
El equipo de Javier Aguirre afronta el choque en el Real Arena tras el 0-0 de la ida de las semifinales en Son Moix con el objetivo de «defender con gallardía la ilusión» de sus aficionados, según ha declarado el técnico mexicano este lunes.
Los bermellones llegan a la cita por un puesto en la final -que han alcanzado en tres ocasiones, una de ellas, levantando el trofeo en 2002- después de superar cinco eliminatorias, la última ante el Girona FC en Son Moix (3-2).