Al Cleba le quedan dos duelos directos para lograr la salvación

El Rodríguez Cleba aún no tiene asegurada la permanencia en la División Honor-Oro. Las leonesas se encuentran ahora mismo en la octava posición de la Liga, solo tres puntos por encima del descenso, pero eso sí, con varios rivales por debajo peleando por lo mismo. Quedan cuatro jornadas para que concluya la temporada regular y la buena noticia para las de Leo Álvarez es que tienen que medirse a dos rivales directos; Almassora y Pozuelo, uno como visitantes y otro en León. El resto de enfrentamientos, a priori, no se antojan nada sencillos para sumar pues enfrente se encontrarán con Zonzamas —cuarto clasificado— y Morvedre, que ahora mismo comanda la tabla.

Dos maneras de verlo

Es cierto que el vaso puede verse medio lleno o medio vacío para un Cleba que está pasando más apuros de los esperados en un principio. Comenzó el curso con grandes sensaciones y sumando más puntos de los que se podía presuponer, pero luego han dejado escapar algunas victorias que nadie esperaba.

El máximo responsable del banquillo insistió a principio de temporada que aspiraban a lograr la permanencia «antes» que el curso anterior, demostrando que se habían asentado ya en la segunda competición nacional del balonmano femenino español. No va a ser posible mejorar mucho sus números, aunque nadie duda de que el Cleba tiene en su mano la salvación en una División Honor-Oro que de cara a la 2024-25 ampliará a catorce los equipos —dos más que en la actualidad— para dotarle a la Liga de mayor peso y jornadas. Ahora toca vencer a esos dos rivales directos y que la permanencia sea algo matemático.