El Ademar salva su primera final

Europa sigue en la mente del Abanca Ademar. Al menos la batalla por alcanzar la cuarta plaza liguera que pueda llevarle a la competición continental el próximo ejercicio. Los leoneses lo tienen complicado. Pero es su única vía. Por eso ayer se agarraron a ese reto con un triunfo sufrido en la pista del colista Puerto Sagunto (27-31). Sufrir bien vale la pena si al final se logran los dos puntos. Y ayer los de Daniel Gordo tuvieron que hacerlo en un partido en el que no brillaron, pero cumplieron con la premisa de salir airosos.

Y eso que los leoneses volvieron a mostrar su habitual y poco fiable versión como visitante. Frente a un equipo mermado por las lesiones y que apenas suma dos victorias en las 25 jornadas disputadas, el plantel ademarista tuvo fases con demasiados errores y se vio obligado a esperar a los últimos minutos para llevarse el triunfo, que le mantiene enganchado a los puestos para disputar competición europea la próxima temporada.

En ese tramo final, la defensa apretó los dientes y logró sacar tres faltas en ataque casi consecutivos, cuando el rival jugaba con portería vacía, y así pudo establecer la máxima renta de todo el partido con cinco goles, que un tanto desde los 7 metros de los valencianos con el tiempo cumplido dejó el marcador en el definitivo 27-31.

En el comienzo no pareció que el Abanca Ademar fuera a tener tantos problemas para llevarse su primera victoria como visitante desde hace más de dos meses. Un arranque fulgurante y pleno de intensidad hizo que el primer parcial fuera de 0-4 y obligara al técnico local a pedir su primer tiempo muerto, aunque ya en ese tramo se vislumbró lo que sería la dinámica en el resto del choque, porque un error en un lanzamiento claro evitó que la brecha de inicio fuera más grande.

A partir de ese momentos, varias pérdidas de balón permitieron a los locales meterse en el partido e igualar las fuerzas con otro parcial de 4-0. Conscientes de que los valencianos cuentan con una rotación muy corta, el Ademar movió pronto el banquillo y antes del ecuador de la primera mitad ya había utilizado a todos sus jugadores de campo. Sin embargo, los intentos por imprimir un ritmo alto al encuentro se convirtieron en muchos momentos en precipitaciones, que el Puerto Sagunto supo aprovechar para tener su primera ventaja en el 7-6 (minuto 13).

En esa fase, los leoneses solo encontraban claridad cuando podían correr, aunque todavía antes del descanso y con un juego posicional más incisivo tuvieron otra ocasión para poner tierra de por medio en el marcador, que desaprovecharon en otra fase de errores. Así y con dos goles de ventaja, el comienzo de la segunda parte fue el opuesto a la primera, ya que los valencianos salieron mucho más enchufados y endosaron un parcial de 4-0 que avisaba al Abanca Ademar que no lo iba a tener fácil, pese a que los valencianos serán probablemente equipo de División de Honor Plata la próxima semana de forma matemática.

Otra vez los errores en lanzamientos claros, que se encontraron con la figura del portero Dani Martínez, internacional júnior con la selección española, lastraron al Abanca Ademar, que no daba con la tecla para hacerse con el dominio en el choque. Hasta tres goles de desventaja llegaron a acumular los visitantes, que intentaron incluso un cambio en la portería con la salida de Álvaro Pérez, ya que Saeid apenas tocaba el balón.

Durante muchos minutos, las diferencias se estabilizaron entre los 2 y los 3 goles a favor de los locales, un tramo del encuentro en el que Rodrigo Pérez desde el lateral derecho era el que sostenía a los suyos en ataque.

Cuando las fuerzas ya les empezaban a fallar a los locales, el Ademar endosó un parcial de 0-5 que dio la vuelta al electrónico, aunque el Puerto Sagunto todavía tuvo un arreón más para intentar dar una alegría a su entregada afición. Así y con el marcador igualado, los leoneses pudieron sacar rédito de su mayor profundidad de banquillo y la mayor frescura se notó en defensa, donde las tres faltas en ataque casi consecutivas acabaron de decantar el choque. La dirección de Juan Castro en los momentos críticos y la calidad de lanzamientos de Carlos Álvarez fueron algunas de las individualidades más destacadas en el Ademar, mientras que los locales estuvieron liderados por su capitán, Nolasco, y por un Pueyo, que hizo su mejor partido en Asobal.

El Abanca Ademar, aunque con sufrimiento y con un juego irregular, habitual en una temporada en la que los leoneses muestran dos caras bien distintas cuando ejercen de locales o de visitantes, hizo los deberes en Puerto Sagunto. Su triunfo mantiene a los de Daniel Gordo en la batalla por un hipotético premio para el cuarto clasificado de la Asobal en forma de billete para las competiciones europeas el próximo ejercicio. La primera de las finales que tiene que afrontar hasta que concluya el campeonato la superaba con dos puntos más para su zurrón.

Eso sí, el tropiezo que se esperaba que pudiera tener Logroño en su partido frente al Benidorm no se produjo y los riojanos con su victoria por 33-23 mantienen ese cuarto peldaño de la tabla con cuatro puntos de renta respecto a los ademaristas.

La próxima los leoneses reciben en el palacio a uno de los ‘gallos’, el Bidasoa, y Logroño viaja a la pista del Viveros Herol Nava.

«Hemos vuelto a hacer un buen partido, pero tenemos una rotación corta. Los chavales han vuelto a dar una lección de lucha y temperamento. En la primera parte no nos hemos ido por delante por un par de detalles y en la segunda hemos ido casi siempre por delante, pero ellos tienen 16 jugadores para rotar y eso al final se nota. Nos hemos quedado sin oxígeno en esa parte decisiva y hemos tenido que echar manos de un jugador (Pujol) al que hoy han dado el alta después de varios meses de baja y ha tenido que jugar casi toda la segunda parte. Hay que quedarse con el milagro que supone que este equipo siga compitiendo».

LOS ENTRENADORES

«Venir al Puerto de Sagunto siempre es un alegría por el gran ambiente de balonmano que hay. Nos hemos enfrentado a un equipo que se ha vaciado y hemos conseguido una victoria trabajada, aunque nos hemos hecho un buen partido. Hemos vuelto a estar fallones en situaciones claras de lanzamiento y estoy contento con la victoria, que hemos conseguido tirando de oficio. Estoy insatisfecho con el juego porque teníamos que haber dado más. Hemos controlado en algunas fases, pero los fallos nos han lastrado. Llegamos a los 29 puntos, que son muchos, pero volvemos a tener muchas imprecisiones».