El Palacio da la cara un año después
Las obras en la instalación municipal alcanzan su última fase tras siete meses de retraso
El Ayuntamiento no tiene intención de arreglar la zona de los vestuarios
El Palacio de Deportes ya luce sin andamios en su fachada, aunque la obra aún no está lista. F. OTERO
pOLIDEPORTIVO
Un año después, el Palacio de Deportes de la capital leonesa comienza a ver la luz. Tras siete meses de retraso —debía estar listo en noviembre de 2023— la reforma energética de la instalación municipal entra en su última fase. Los andamios son ya historia en sus cuatro fachadas y los operarios avanzan en la colocación de cristaleras y otros detalles que aún no se han terminado. En el interior queda rematar la zona del palco y la grada baja.
Lo que no está previsto que se acometa —nunca lo estuvo en este proyecto— es la reforma de la zona de vestuarios, situada justo debajo de la grada alta. Es una vieja reivindicación del Abanca Ademar, entre otros clubes que hacen uso del Palacio habitualmente, pero desde el Ayuntamiento no lo plantean a corto plazo. Lo hicieron, al menos de forma verbal en la anterior legislatura, pero nunca se puso en marcha. En la nueva ni siquiera se ha planteado. Y es que, después de más de medio siglo desde que se pusiera en pie en pabellón, sin duda esa zona es una de las que más intervenciones necesita.
Los vestuarios, la sala de prensa o la enfermería se han quedado muy obsoletos con el paso de los años. No parece la mejor imagen para acoger tanto a los equipos de León como a los visitantes, pero seguirán así por más tiempo. El Ayuntamiento sí intervino en el parqué del Palacio hace unos años.
En lo que a la reforma actual se refiere, lo importante ha sido aislar todo el recinto para mejorar su eficiencia energética. Además se ha cambiado la iluminación interior —ese era uno de los requisitos principales que impuso la Asobal a los clubes cuando se convirtió en Liga Profesional— y se ha habilitado una zona más amplia y mejor para colocar a las personas de movilidad reducida.
La obra, que tiene un coste de unos tres millones de euros, se ha sufragado en su gran mayoría con fondos europeos. Los continuos retrasos a la hora de terminarla —se han pedido varias prórrogas— hicieron que Europa sancionara al Ayuntamiento de León quitándole parte de la subvención, tal y como adelantó este periódico y confirmó el propio concejal de Deportes.