Hungría le pone corazón y aún sueña con pasar como tercera
Entre la alarma por Barnabás Varga, evacuado del campo en camilla tras una caída en el minuto 74, en la que quedó aparentemente inconsciente, Hungría alcanzó de repente la tercera posición del grupo A con tres puntos y una victoria a última hora, en el décimo minuto del añadido, en la penúltima jugada, por medio de Csoboth (0-1).
Hasta minutos antes, hasta que no le quedó otra que atacar, con un remate al poste incluido, Hungría no se lanzó de verdad a por un triunfo indispensable, que recibió con emoción, pero también dentro de la preocupación derivada del suceso del partido, cuando Varga fue retirado del campo, entre lonas, a la espera de su diagnóstico.
Su imagen en el suelo, inconsciente, desató la alerta sobre el campo en el minuto 68. Sus compañeros se dieron rápidamente cuenta, reclamaron las asistencias, giraron el cuerpo de su compañero para facilitar su respiración y fue atendido sobre el césped durante unos minutos, cubierto el lugar con unas lonas que recordaron tragedias anteriores, como aquel drama de Christian Eriksen en 2021 cuando se desvaneció sobre el terreno.
Finalmente, el delantero fue evacuado del campo en camilla, entre los aplausos del público, tras la revisión de un penalti que el árbitro no concedió. El encuentro continuó. Quizá la mejor señal de que el estado del atacante no era tan comprometido como para detener definitivamente el choque. En cualquier caso, fue reemplazado, a la espera de las noticias médicas que informen del estado del futbolista.
Después, su equipo ganó de pronto. No había hecho méritos hasta el tramo final, hasta que se lanzó a por la victoria.