La temporada afronta su recta final con los caudales bajos

La temporada de pesca en los ríos de Castilla y León llegará a su fin el próximo 15 de octubre. Has sido casi siete meses por delante desde que levantara el telón allá por los últimos días de marzo. Y con un trayecto en clave positiva que ha mantenido la tónica de los últimos años en los más de 2.000 kilómetros de masas de agua trucheras de la provincia.

Con el estado de los caudales típico de estas fechas, bajo y en algunos casos dificultoso para una buena pesca, los aficionados tanto leoneses como procedentes de otros puntos de la geografía nacional, tienen por delante apenas una semana y media para poder matar el gusanillo y darse la última alegría antes de que la campaña en los ríos regulados de León concluya (en los no regulados salvo las excepciones marcadas por la normativa lo hacia el 31 de julio).

Salvo aquellos que tengan la oportunidad de poder disfrutar de algún lago regulado para que esa pasión no tenga que tomarse unos meses de asueto hasta finales de marzo de 2025.

Quedan pocos días y ya puede hacerse un balance de la temporada. Positivo en líneas generales con notas altas en algunos momentos de la campaña. Ríos en buen estado con caudales óptimos salvo las situaciones que determina la época del año, más de 2.000 kilómetros de masas de agua para la pesca con una variedad de escenarios con aguas más bravas y otras más tranquilas y un importante número de truchas (la reina de cada temporada en la provincia leonesa) también de gran tamaño han sido condicionantes importantes y favorables para que la calificación final, a falta de apenas una decena de días, no pueda ser m´s satisfactoria. Para los amantes de la pesca con muerte y también para los de la sin muerte, cada vez en este segundo caso en un mayor número.

Y es que León, la provincia de norte a sur y de este a oeste es un lugar de referencia para la pesca. Desde hace años por sus escenarios, dimensión y por una gran y brillante afición.