El Ventas Oeste, un pabellón sin ley

El «abandono» municipal del pabellón Ventas Oeste no tiene fin. A la suciedad, la falta de mantenimiento —una de sus cristaleras lleva años con numerosas grietas y roturas— o la ausencia de conserje, entre otras deficiencias, se sumó hace solo unos días un baño destrozado. Techos reventados, escombros y mobiliario en malas condiciones fue lo que se encontraron varios de los padres cuyos hijos forman parte de la cantera del Ademar, que desde hace unos años tiene asignada esa instalación como ‘centro de operaciones’ para los entrenamientos y partidos de sus equipos de base.

Una situación que tildan de «insostenible» y para la que tanto Ayuntamiento como el propio club no dan solución —al menos definitiva— pasándose la patata caliente uno al otro sobre quién debe ocuparse de mantenerlo en buen estado. Los problemas de vandalismo vienen de lejos. Ya el pasado mes de febrero aparecía uno de los extintores de incendios vacío y con todo su gas interior —que se solidifica cuando se descarga— extendido por baños y zonas comunes. «Es el pan nuestro de cada día», insisten algunos progenitores, hartos de la desidia municipal —han trasladado varias quejas— frente a un problema que todos conocen dentro del equipo de gobierno.

Ante el último episodio en uno de los baños del Ventas Oeste —en concreto el de caballeros— la única medida que se ha tomado hasta la fecha es cerrarlo a cal y canto.

La limpieza

El servicio de limpieza es otro de los caballos de batalla. Según los padres la limpieza deja mucho que desear. «No es culpa de la trabajadora, que hace incluso más de lo que puede, sino de que no existe un plan de limpieza semanal ni más personal. A veces pasan semanas y nadie viene». Los responsables de la cantera ademarista entienden el malestar. Ellos también lo viven en sus propias carnes. «De momento no nos dan soluciones». Al cerrar la 2023-24 se planteó un traslado de la base del Ventas Oeste al pabellón de Puente Castro para este curso, pero todo quedó en agua de borrajas.

La pista de juego tampoco presenta las mejores condiciones. En ese sentido esta misma semana han comenzado a limpiarla por zonas. Precisamente en la reciente asamblea general del Ademar —tuvo lugar el pasado 28 de septiembre— hubo socios que se quejaron de las condiciones que viven los canteranos en el Ventas Oeste. El propio Cayetano Franco reconoció allí mismo que «es un pabellón indigno» para la historia que tiene el club, aunque no especificó si iban a volver a pedirle al Ayuntamiento de la capital una solución definitiva.

Lo único cierto es que el Ventas Oeste es, desde hace mucho tiempo, un pabellón sin ley y sin gobierno.