El Ponferrada XXI se defiende

En la tertulia del programa «Ser deportivos» de Radio Bierzo del pasado día 5, en la que además del director del mismo intervinieron un colaborador de la emisora y Ramón Díez, redactor de este periódico, y en la que se analizaron diferentes aspectos del deporte ponferradino, acabaron por verterse unas opiniones acerca de la gestión del equipo de fútbol sala de la ciudad, el Ponferrada XXI, que han provocado la reacción de la junta directiva del equipo a través de este rotativo. En una carta de tres folios se critica que por parte de uno de los tertulianos (del que no se dice su nombre en la misiva) existen «intereses algo más que deportivos», lo que explica que en sus opiniones haya «atrevimiento, resentimiento, odio y sorna». En concreto, dicho tertuliano tachaba de «ridícula» la marcha del equipo, a lo que el club replica que «nos marcamos un plazo de cuatro años -para estar en División de Honor- pero nos equivocamos, porque no contábamos con todas las trabas y zancadillas que vosotros -la prensa- principalmente nos habéis puesto», añadiendo que la subvención municipal del equipo, de 4,5 millones de pesetas, es inferior a la de cualquier otro club de la ciudad. Otro punto que sentó mal en el seno del Ponferrada XXI fue la aseveración que se hizo en el programa de que el equipo recibe «un trato especial y ayudas divinas», refiriéndose al Ayuntamiento, un punto al que el club responde comparando su situación deportiva con la de otros equipos de la ciudad, especialmente con el Ciudad de Ponferrada de baloncesto, y pide igualdad de trato entre unos y otros. Además, añade que sus posiblidades con la subvención recibida son más limitadas que las de otros equipos con menos presupuesto. Palos al baloncesto Continuando con las opiniones vertidas en el programa de radio, en el que se invitaba al Ponferrada XXI a imitar el ejemplo de gestión del Ciudad de Ponferrada, la carta de la junta directiva prosigue diciendo que respeta al equipo de baloncesto y su gestión, «pero sus formas las cuestionamos». Y es que según el equipo de fútbol sala se mantuvieron reuniones entre ambos clubes en las que se pidió que se respetaran sus pancartas y «estudiar el reparto de espacios libres e incluso de publicidad», pero a la hora de la verdad «no sólo no respetan nuestra publicidad sino que es a quien primero visitan, les venden publicidad más barata y a algunos se la venden para baloncesto y fútbol sala». Según el Ponferrada XXI, «de nada han servido posteriores reuniones porque según ellos nada es negociable. No vamos a hablar de preferencias pero sí de ética, no nos han dejado ni un hueco. No podemos vender publicidad porque no tenemos dónde colocarla». La carta finaliza este asunto del baloncesto diciendo que «no se puede entrar en el pabellón como el Séptimo de Caballería, hay formas». Por último, el Ponferrada XXI niega cualquier tipo de oscurantismo en su gestión y asegura que pueden presentar sus cuentas al día, descartando cualquier acusación de despilfarro.