El Real Madrid deberá vencer al Dortmund si quiere optar a la «décima»

«Es un día clave y queremos defender nuestra condición de campeones de Europa. Nos encontramos en una situación incómoda por el error que supuso el último empate en casa ante el Lokomotiv de Moscú», reconoció el preocupado técnico blanco, Vicente del Bosque, tras el último entrenamiento que dirigió bajo la nieve. El Madrid no sabe lo que es ganar en esta competición desde que el 25 de septiembre de 2002 goleara al Genk (6-2), en Chamartín. Después, empate en Atenas (3-3) y en el Bernabéu (2-2) frente al AEK, derrota en casa ante el Roma de Capello (0-1) y discreto empate en su visita a tierras belgas (1-1). Ya en la segunda fase, derrota hasta cierto punto lógica en Milán (1-0) y grave empate (2-2) ante el Lokomotiv. Del Bosque, que probablemente repetirá el mismo equipo que rozó el ridículo en Pamplona y echa de menos la ausencia del experto capitán, Fernando Hierro, concede tal importancia al choque que concentrará a todos sus jugadores para que tengan «información directa del rival y estén unidos en un momento fundamental». El técnico salmantino destacó la fortaleza del adversario y, sobre todo, la interesante y desconcertante mezcla entre alemanes, brasileños (4) y checos (2) que caracteriza el once tipo del vigente campeón de la Bundesliga y ahora segundo clasificado, a ocho puntos del Bayern de Múnich. «Es el equipo menos alemán de todos, capaz de jugar con balones largos y por arriba en busca del gigante Koller, pero también a base de combinaciones a la brasileña», advirtió, por su parte, el lateral gallego Míchel Salgado. Los teutones llegan a Madrid pletóricos de moral, ya que acaban de golear al Bochum (4-1). Su técnico, el ex internacional Matthias Sammer, ha exigido a sus jugadores que confíen en sus posibilidades y pierdan el excesivo respeto que tradicionalmente les atenaza en sus visitas al Santiago Bernabéu. «Ante el campeón carece de sentido jugar con una estrategia meramente defensiva. Queremos tener el balón y jugar lejos de la portería de Lehmann», argumentó Sammer, nada más llegar a Madrid. Un técnico que tiene a su equipo segundo del grupo C con tres puntos en dos partidos, saldados con una victoria en Rusia y una derrota por la mínima ante el Milan. Sammer asume que el trabajo ofensivo del Dortmund depende en gran medida de lo que pueda hacer el checo Thomas Rosicky, el conductor del equipo, un fino y técnico jugador que al principio recibió no pocas burlas por su aparente endeblez y que se presenta recuperado de una lesión en el tendón de Aquiles. También se han recuperado los tocados Khel y Frings y regresa a la convocatoria el brasileño Marcio Amoroso, ausente del último partido del campeonato doméstico por sanción. Sólo son baja, por lesión, el argentino Juan Ramón Fernández y Otto Addo. Al margen de Rosicky, hay que tener en cuenta la solidez de los centrales Woerns y Metzelder, por los que se ha interesado el Real Madrid y la calidad y rapidez de los brasileños Evanilson, Dedé, Ewerthon y Amoroso.