Media Liga en el descuento

La Real Sociedad dejó escapar ante el Villarreal dos puntos y media Liga de manera increíble, incomprensible e imperdonable. Se dejó empatar el partido cuando ganaba 2-0, en el minuto 92, a un desanimado equipo de Floro y Anoeta festejaba que su equipo era líder provisional y metía presión al Real Madrid, que aún debía medirse al Deportivo. Nadie podía imaginar que los donostiarras no sumarían tres puntos de oro en el maratón hacia el título cuando, puesta en pie, la afición «txuri urdin» despedía a Kovacevic. El serbio, en ese momento el héroe de la tarde por sus dos goles, fue retirado por Denoueix, a tres minutos de final, sólo para que recibiera el merecido homenaje de la hinchada. Pero la Real cometió un error gravísimo que le puede costar la Liga. Así de claro y dramático a la vez. Con todo resuelto, sus jugadores se fueron del partido antes del final. Se pusieron a hacer cábalas, a pensar en los próximos y decisivos partidos ante el Deportivo, en Riazor, y el Real Madrid, en Anoeta. Por eso, los zagueros donostiarras permitieron al pequeño Víctor cabecear plácidamente en el área pequeña, en el segundo de los tres minutos de prolongación. El gol del honor pensaron. Insensatos. Con el tiempo ya cumplido, una falta y un córner muy discutido a favor del Villarreal. Tras el saque de esquina, barullo tremendo con 22 jugadores en el área, ya que el portero Reina subió a rematar, y zapatazo de Jorge López. Anoeta enmudeció primero y protestó después, ya que era el minuto 94 y, según indicó el cuarto árbitro a instancias del principal, debieron jugarse 93. El Villarreal, que durante todo el partido había merecido más pero se mostró romo en punta, estalló de júbilo. Hasta ese instante, la Real había acreditado su candidatura al título. De nuevo, resolvía sin brillar, sin crear apenas ocasiones, algo que sólo está al alcance de los elegidos. Dos goles de Kovacevic, el segundo en uno de esos penaltis que existen y casi nunca se pitan, servían para achuchar al Real Madrid.