OPINIÓN López Clausín
Lamentable arbitraje
Hacía mucho tiempo que no presenciaba un arbitraje tan deficiente. Pasotismo total en el árbitro durante el transcurso del encuentro. Muy mal en el apartado físico. También penoso en el aspecto físico. Consintió desde el principio las continuas provocaciones de los delanteros del Real Avilés, con agresiones incluidas. La más contundente, en el minuto 9, de Lobera a Suárez. Debió expulsar al jugador avilesino. También a Irazusta por rematar a puerta con la mano, cuando ya había sido amonestado anteriormente por idéntica acción antirreglamentaria. Pero en otro error grave no señalizó ni falta. Menos mal que el balón no llegó a entrar a gol. Suárez y Casquero, la quinta Aunque estuvo correcto en las seis amonestaciones, no siguió el mismo criterio en acciones que también eran merecedoras de tal castigo. Las mostradas a Suárez y a Casquero suponen la quinta, con lo cual no podrán jugar el próximo partido. Dejó sacar un córner el cántabro Toledo Fernández cuando el árbitro asistente no había llegado a su posición. Los árbitro asistentes se solidarizaron en la segunda parte con el principal. Estuvieron horrorosos. El punto culminante llegó cuando señalizó una sustitución cuando el balón estaba en juego. No entiendo que este colegiado lleve varias temporadas en Segunda B. No merece estar en esta categoría por su actitud.