León cae pero sigue totalmente vivo

León salió a la cancha fiel a su estilo y obtuvo desde el primer momento el dominio en las zonas lo que le permitió abrir una leve brecha. Pero un triple de Quintana permitió a Bilbao ponerse arriba para iniciar el despegue (11-6), lo que forzó a Quino Salvo a pedir un tiempo muerto a los cinco minutos. La rapidez de los hombres bajos locales hacía mucho daño. León buscó nuevos cauces pero su ataque estaba atascado, y Bilbao castigaba con triples su aro. Quino sacó a Tchiloemba por Reid y logró limar la ventaja de los vascos, que empezaron a mover su banquillo. Pero Quintana castigaba con los triples el aro leonés, que abría su defensa para frenar los artilleros vascos. Al final del primer cuarto, Bilbao ganaba (21-16) y quedaban sobre la mesa las cartas. León anotaba bien bajo el aro (sus pívots sumaban 12 puntos), pero el tiro exterior local era inapelable (Quintana y Javi Salgado tenían 17 entre los dos). En el segundo cuarto, siguieron las mismas pautas y Quino Salvo devolvió a la pista a Reid porque el joven Splitter empezaba a despertar y ya daba problemas. Y Brown empezó a anotar en el momento que más falta hacía, lo que permitió a limar la renta bilbaína para acercarse (26-25) a seis minutos para el descanso. De zona a individual Bilbao optó por abandonar su defensa zonal para poner en marca una individual que dio paso al primer triple de Reid con Baloncesto León, una canasta que puso al equipo arriba. Txus Vidorreta pidió un tiempo muerto porque León empezó a tomar la iniciativa gracias a otro triple de Larragán, y Quino lo aprovechó para sacar a pista a Sony Vázquez para sustituir a un Brown que no tenía su día. El partido se había dado la vuelta y ahora León castigaba con sus triples (Sony y Larragán) y Bilbao anotaba bajo el aro con el jovencísimo Splitter apoyado por Ismael Torres. La segunda personal de Larragán sacó a la pista a Pepe Llorente, a dos minutos para el descanso. El partido entraba en una fase my bronca, con el público presionando a los árbitros y los jugadores «volando» al suelo en cada ataque. Quino dio entrada a Martín Ferrer para parar a Splitter, que con su juventud se aprovechaba de la lentitud de Reid. Al descanso, 37-43 para León. En el tercer cuarto, León sacó de nuevo su quinteto y Bilbao recuperó el acierto con los triples, lo que le permitió empatar el partido, que entró en una fase de intercambio fácil de canastas. Si hasta el descanso las defensas se imponían, ahora ganaban los ataques. Pero el primer equipo que empezó a fallar fue León y Bilbao recuperó la iniciativa, momento que aprovechó para sacar a pista a uno de sus refuerzos: el base Cazorla. Quino sacó a Llorente, Sony y Tchiloemba, y un triple del gallego puso a León arriba, pero la igualdad sería la pauta. El periodo se cerró con la inquietante cuarta personal de Brown. (61-58). Riesgo asumido En el cuarto definitivo, Borja volvió a la pista y Quino asumió el riesgo de sacar a Brown porque el partido vivía su momento clave. Jorge anotaba fácil y permitía a León mantenerse sus opciones mientras los minutos avanzaban. El equipo era consciente de sus opciones y aguantaba la presión de la grada. La veteranía de Reid permitió a León ponerse uno arriba (70-71) a 2:30 para el final. La tensión era máxima, con empate a 74 a falta de un minuto. Un intercambio de punto no varió la situación, pero Lucho anotó a falta de veinte segundos (78-76). León se la jugaba y optó por un triple. Jorge no pudo y Bilbao sumó su primera victoria.