EL FÚTBOL TRIUNFÓ

El Promesas se la jugaba. Se jugaban mucho en el envite los de José Díez por esos tres puntos que le permiten seguir peleando por la promoción, y los de Casimiro por mantener la imagen de un club ya histórico en la Tercera División aunque en una temporada irregular con mejores resultados lejos de Bembibre que en su feudo. El partido fue muy disputado como suelen ser todos los de rivalidad comarcal en que ambos contendientes son de sobra conocidos. La clave. El colegiado del encuentro tuvo dos decisiones por lo menos discutibles, la primera cuando anuló el gol de Alberto en el minuto 27 del segundo tiempo por un fuera de juego dudoso. Y la segunda cuando ya en el último minuto del descuento, en una pugna entre Susi y Cotarelo, el delantero se va al suelo y el colegiado, próximo a la jugada, decreta la pena máxima que va a suponer el gol del triunfo para el Promesas al encargarse Alberto de transformarlo.