«Hablé con mi director y le confirmé que estaba bien»

Javier Ramírez, con el triunfo obtenido ayer en la vuelta a León es muy probable que la próxima temporada corra en un equipo profesional, tal y como le ocurrió a anteriores ganadores como Francisco Palacios (Café Baqué-Labarca 2) o Egoi Martínez (Euskaltel-Euskadi). El ciclista del equipo granadino Ávila Rojas venció en la segunda etapa de la vuelta, Cistierna-Cistierna, que debido a la nieve, lluvia y niebla se convirtió en un verdadero infierno para los corredores. Esta victoria le posibilitó conseguir el jersey de líder, que no abandonó, y que sus compeñeros de equipo le ayudaron a conservar. Ramírez, muy satisfecho por esta victoria en una vuelta de carácter internacional, dedicó el triunfo a su familia, el equipo y a los directivos. Muy contento, destacó que «hay muy pocas vueltas internacionales, por lo que la victoria supone una gran satisfacción para mi». Los momentos difíciles durante los días de competición fueron varios, puesto que en una etapa hay multitud de vicisitudes. Pero en estos casos, Ramírez siempre contó con la ayuda del equipo. El paso por el puerto de las Señales, en la segunda etapa, le dejó buenas sensaciones, por lo que «hablé con mi director y le confirmé que me encontraba perfectamente, y en el último puerto de la jornada lancé el ataque definitivo». La cita de Ramírez, al igual que la de Rovira en la jornada de hoy es la Gran Cursa de Llobregat, puntuable para la Copa de España, en la que el andaluz es líder y espera que el esfuerzo en la vuelta a León no le pase factura. La etapa de ayer resultó muy cómoda para Ramírez, quien estuvo arropado en todo momento por su equipo. El nivel de la vuelta le pareció muy alto y sobre su posible regreso a un equipo profesional declaró que «esta victoria me ayudará a encontrar equipo y espero que junto al resto de pruebas en las que gane durante la temporada, se acuerden de mi».