SEGUNDA DIVISIÓN B
Este cuento se acabó
La Deportiva concluyó la temporada con la misma indefinición que le ha venido caracterizando durante toda la segunda vuelta. Aunque eran los locales los únicos que se jugaban algo en el evite, las mejores ocasiones corrieron d
La Sociedad Deportiva Ponferradina no pudo pasar del empate sin goles ante la Unión Popular de Langreo, en el partido que sirvió para cerrar la campaña en Ganzábal. Los locales se ventilaban la permanencia matemática, para lo cual precisaban ganar, pero los de Roberto Aguirre se mostraron como un equipo inoperante cara a gol y, para más inri, una acción infantil del veterano Terente les dejó con uno menos durante más de media hora. Sorprendió Simón de salida, alineando a tres centrales, con la inclusión de Arcadio junto a César y Tomás. Como consecuencia de ello, Alejandro se quedó fuera del equipo, aunque una lesión de Fuentes le permitió entrar en liza antes del descanso. Los asturianos salieron en tromba sobre el portal de Cobeño, pero todo lo que hicieron en el aspecto ofensivo en esta primera parte fueron disparos lejanos que nunca inquietaron al meta madrileño. La Deportiva tampoco es que hiciera nada espectacular durante este primer tiempo, hasta el extremo de que la única jugada de verdadero peligro llegó ya al borde del descanso, cuando Panadero remató con la cabeza a las manos de Noguerol, que estaba bien colocado. Con esa acción se llegó al intermedio. Mejoró algo el partido en la segunda parte, porque empeorar ya era prácticamente imposible. Con el Langreo volcado sobre la portería berciana, las ocasiones más claras cayeron del lado blanquiazul en los contraataques, llevados casi siempre por Toñín y Cascallar en banda derecha. Para que eso fuera así influyó decisivamente la expulsión del capitán asturiano Terente, que zancadilleó por detrás a Mangas, en una acción plena de inocencia, ya que se produjo en el centro del campo y sin que el avance del salmantino significara peligro inminente. El capitán langreano fue justamente expulsado por el cántabro Bezanilla Losa y a partir de ahí el choque se puso cuesta arriba para los locales. Sin embargo, cuando todo hacía indicar que los de Simón podrían resolver en una contra, apareció el mismo infortunio que ha venido persiguiendo al equipo durante toda la segunda vuelta. Un centro medido de Cascallar lo remató Alejandro con la testa, yendo el cuero a estrellarse contra el travesaño, con Noguerol ya batido. No fue la ocasión más clara de los bercianos, porque Toñín, amo y señor de su banda, se plantó solo ante el meta asturiano, aprovechando el cansancio del lateral Asenjo, que se veía impotente para frenar al ponferradino y a Juan Luis Cascallar. El caso es que Toñín elevó la pelota sobre el portero azulgrana con la mala suerte de que también tropezó con el larguero, antes de salir desviada fuera de la portería. La acción vino precedida de un magnífico cambio de juego de Lanza, desde el lateral zurdo, que dejó a Toñín con todo a su favor. Lanza ocupó esa demarcación defensiva desde la lesión de Fuentes, en el minuto 40 de partido. Con la decepción del público, por no haber podido certificar la permanencia, concluyó el envite.