León está herido, pero hay vida

Se cumplieron los pronósticos y el Tenerife salió en tromba a la pista para colocar las primeras rentas en el marcador. León dejó patentes desde las primeras jugadas sus problemas en ataque, aunque las habituales imprecisiones dominaban la cancha. León logró con un tiro libre de Julio su primer punto, a los tres minutos. Quino Salvo intentó reorganizar al equipo con un tiempo muerto, pero León estaba atascado y se estrellaba una y otra vez contra la buena defensa del Tenerife. Los visitantes bajaron algo el pistón y Larragán con un triple puso un 8-9 en el marcador que abría las opciones. Pero Paco García cambió de base y con Reynés en pista los visitantes volvieron a irse, a pesar del triple de Reid que puso el único empate del partido, a 11 puntos. El banquillo de León reclamaba calma a sus jugadores al dispararse las precipitaciones, pero el Tenerife combinaba sus defensas y movía el banquillo para hacerse poco a poco el dueño de la cancha. En los instantes finales del cuarto, Reid fue derribado en una penetración y los árbitros optaron por pitar una técnica a Salvo por protestar. Tenerife apuró sus opciones y un triple de Reynés puso un 14-23 en el marcador que tampoco era muy injusto con lo visto en la cancha. En el segundo cuarto, León puso en pista a Tchiloemba por Jorge y Julio aprovechó que la defensa de Tenerife no salía a buscarle para anotar dos triples casi consecutivos. El canterano se quedaba solo a la hora de anotar por la total inoperancia de Brown y Jorge. A los tres minutos, Tenerife volvía a tener en pista un equipo en el que no quedaba nadie del quinteto inicial. La entrada de Sony dio algo de fluidez al ataque, pero Larragán no tenía su día para buscar opciones con posibilidades. La tensión se estaba adueñando de la pista y el partido entró en una fase de auténtico correcalles, que aprovechó León para ponerse a cuatro puntos pero Tenerife volvió a sacar a sus postes titulares, que tanto daño hicieron.