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BALONCESTO

Nunca hubo tanto para lo mismo

Baloncesto León cerró su tercer año en LEB con muy mal sabor de boca, tras una temporada marcada por una irregularidad que le llevó a tocar el cielo en un par de momentos pero también al infierno en muchas etapas. Sólo Julio, Llorente

Publicado por
Carlos Frá Redacción - LEÓN.
León

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Ha sido el mejor año en LEB, pero poco importa. Había un único objetivo y no se logró. Al final da exactamente igual quedarse en las puertas que a las primeras de cambio. Otro año sin ACB. León arrancó de forma inquietante y sólo logró entonar en noviembre con la llegada de Larragán, Evans y Tchiloemba. Vivió su momento dulce hasta el parón navideño, con las cinco victorias consecutivas. Pero el turrón no sentó bien al equipo y comenzó una andadura errante durante toda la segunda vuelta que le llevó a sumar un balance de ocho victorias -nunca más de dos seguidas- y siete derrotas que le deparó la temida quinta plaza, con el consiguiente cruce con el Tenerife. La tercera plaza abriría otro camino pero se optó por elucubrar para ser sextos. Fue un año récord. Nunca se cambio tanto la plantilla en LEB. Siempre había un culpable al que señalar, y que pasaba por la picota para traer el nuevo capricho de turno. Recambios y más recambios, para que Reid viese desde el banquillo como su equipo moría un año más. El incuestionable éxito con el Bilbao, para solventar el inicial fracaso, hizo olvidar la liga regular y el sueño de la ACB planeó hasta que el equipo volvió a la que ha sido su realidad a lo largo de meses y meses. Todo estaba en manos de individualidades, y llegó el fracaso abierto el miércoles y confirmado el viernes. El consuelo es que el rival tiene 600.000 euros más de presupuesto. Sobre el futuro, tan sólo los canteranos Julio González y Pepe Llorente lo tienen asegurado, junto a aquel fichaje de ACB que arrastra el equipo, Martín Ferrer, que vivirá su último año en León para cerrar una etapa en la que los sucesivos entrenadores le han hecho ir a menos progresivamente. En el resto de la plantilla había cláusulas de continuidad en ACB, como en el caso de Borja Larragán. Pero están todas rotas. Con Sony Vázquez y César Alonso, existe un año más firmado pero ambas partes tienen la opción de salirse. Si León no quiere contar con ellos la indemnización es realmente baja. Jorge García concluye su contrato y tanto para Tchiloemba, como para Brown y Reid, no hay nada firmado. Quino Salvo tenía firmada la continuidad automática si ascendía al equipo, y no lograrlo León tiene una posibilidad de mantenerlo pero sólo si está dispuesto a incrementarle los emolumentos. La próxima semana el club se despidirá con la tradicional cena de las multas y los jugadores se marcharán para casa. El próximo proyecto está avalado hasta diciembre por las ayudas de este año y después quedará en manos de los políticos. Sobre fichajes, León, como la mayoría de los equipos de la LEB con opciones, aguardará los descartes de la ACB porque la llegada masiva de jugadores de los países que tienen convenido con la UE desplazará gente interesante para una liga que se endurecerá aún más con esta nueva situación. Equipos como el CAI, el Bilbao o la pugna de Los Barrios con Algeciras hará un poco más complejo, si cabe, el ansiado ascenso a la élite.