Acertar con la elección

LA ELECCiÓN está hecha o casi hecha. Lo importante es acertar. La Cultural a punto de elegir entrenador para la temporada próxima. Es la piedra angular, sin duda, de un nuevo proyecto que no puede fallar. O al menos hay que poner lo posible, y hasta lo imposible si factible fuera -pura utopía-, para acertar. Y es que no hay espacio, tampoco tiempo, para realizar otra cabalgada inútil por el campo yermo de la Segunda B. El cansancio deriva ya en tedio, y son muchos quienes quedan orillados en el camino, sin memoria para encontrar los domingos la senda que lleva al Nuevo Amilibia. Un fastuoso Estadio que merece albergar, cuando menos, partidos de superior categoría: la ansiada, perseguida buscada con más tesón que acierto Segunda División A. Volver la vista atrás, para encontrar tiempos pasados mejores y diferentes a la vez, es perderse en el túnel del tiempo. La fatiga ha dado paso a la desilusión primero y a la decepción después. De ahí al olvido hay un cortísimo trecho. La elección no es precisamente fácil para tener el más alto porcentaje de acierto. Hay unas condiciones o condicionamientos muy a tener en cuenta. Posiblemente el principal sea el del conocimiento del grupo de Segunda B en que milita la Cultural. Campos, plantillas, entornos y otras circunstancias notables. Una vez hecha la elección, con consejo primero y aquiescencia después proceder a la confección de la plantilla con el visto bueno de los responsables del Club. Porque el mercado futbolero es un poco la feria de las vanidades, en la que la labia de los intermediarios, tal semeja a la de aquellos vendedores callejeros, llamados charlatanes, capaces de venderte bisutería vulgar como piedras preciosas. Misión delicada, trabajo fino, asesoramiento de expertos con el único interés de servir a la Cultural, de apoyar, en la media de sus conocimientos, la elección de los más adecuados al binomio coste-eficacia, esencial en toda empresa y la Cultural, nadie lo olvide, es una Sociedad Anónima por muy Deportiva que sea. Examinar primero los jugadores aún en plantilla para elegir a los que interesen. Y en esta elección hay que tener en cuenta lo de sin prisas pero sin pausas. Luego completar la plantilla con los jugadores adecuados, y aquí también será preciso tener muy en cuenta lo de un puesto para jugador y cada jugador en un puesto.