La Bañeza deja a expensas de un milagro el objetivo de ascender

La Bañeza dilapidó ayer casi todas sus opciones de ascenso en el tercer envite de la promoción tras cosechar su segunda derrota, precisamente ante el mismo rival, el Rayo Majadahonda. Los morados, cuyo único resultado posible era el triunfo, se encontraron en el primer minuto de juego con el primer escollo serio en foma de gol. Fue Iñaki el encargado de dejar patente la fragilidad de la retaguardia bañezana en esta fase de la temporada enviando el balón al fonde de las mallas tras un preciso centro de Javi Sánchez desde la banda derecha. El jarro de agua fría dejó medio tocados. Esa circ unstancia fue aprovechada por los madrileños para intentar sentenciar por la vía rápida pero el envío de Dimas salió desviado por centímetros. A partir del minuto 20 los locales parecieron recobrar el rumbo aunque su falta de pegada evitó que sus intentos llegaran a buen puerto. Sólo Chevi, a los 25 minutos, intentó sorprender a Jabardo, aunque el portero visitante apenas encontró problemas para atajar su chut. La respuesta de los visitantes no se hizo esperar. Iñaki, el jugador más activo del Majadahonda, hizo lucirse a Javi para atajar un balón tras el saque de un córner. A los 45 minutos Javi también tuvo que emplearse a fondo para evitar un nuevo gol de los madrileños en una fase del encuentro en la que el aparente dominio de los locales fue contrarrestado por las peligrosas acciones ofensivas de los visitantes personificadas en Raúl Espinosa y Iñaki. Mejor juego, pero sin goles En la segunda parte los locales salieron decididos a darle la vuelta al marcador aunque nuevamente su falta de acierto en ataque imposibilitó que la superioridad en el cebtro del campo se tradujera en un marcador más favorable. Cuando los bañezanos estaban más cerca del empate un nuevo contragolpe del Majadahonda acabó en el segundo gol. Javi Sanchez fue el encargado de poner un balón de oro a Raúl Espinosa para que el delantero abriera más brecha en el marcador y con ello dejara al borde del ko a los de Luis Carnicero. La situación se tornaba así en casi un imposible aunque los locales no cejaron en su empeño, a pesar de quedarse con un jugador menos tras la expulsión de Rupi por doble amonestación, pero el rival, bien asentado sobre el terreno de juego y con una seguridad palpable en sus diferentes líneas, evitó cualquier contratiempo hasta los instantes finales en los que Josines, al aprovechar el rechace del portero tras atajar un penalti, volvió a dar emoción a la contienda. Sólo la falta de tiempo impidió a los locales al menos seguir soñando. Sólo en los minutos finales con el gol de Josines los locales optaron a sacar algo positivo del partido Raúl Espinosa e Iñaki se bastaron para doblegar a un equipo que no tuvo pegada en ataque Rupi, expulsado por doble amarilla, se perderá el choque del domingo ante el Titánico asturiano