Asobal propondrá mañana el 2+6 como cifra tope de no nacionales

La Asociación de Clubes de Balonmano (Asobal), presentará mañana, en la asamblea ordinaria anual de la Real Federación Española, una propuesta de competición oficial de Liga en la que los clubes podrán cursar ficha a un máximo de dos jugadores no seleccionables (extranjeros) y otros seis más que, sin poder formar parte del equipo nacional español, pertenezcan a países de la Comunidad Económica Europea (comunitarios A y B). La medida responde a las nuevas exigencias legales que presenta el deporte español, a raíz de la aplicación de una sentencia en Alemania, donde Maros Kolpak, un portero eslovaco, ha sido admitido a jugar en la competición de aquel país sin ocupar plaza de extranjero, por entender que los acuerdos que están a punto de firmarse para la adhesión de nuevos países a la CEE y los convenios de relación con otros países que, sin llegar a ingresar en este ámbito, pueden ser aplicados también al deporte. La posibilidad de que la competición española se llenase de jugadores procedentes de paises europeos, ha llevado a las autoridades a tratar de determinar leyes «privadas» que, si bien no respetan en su integridad el texto de las sentencias en cuestión (según las leyes actuales, cualquier club podría formar su plantilla sin necesidad de tener un sólo jugador nacional) sí tratan de defender los intereses del deporte base, para que cuando los actuales jugadores en formación lleguen a edades de competir en la elite, no se encuentren con el mercado bloqueado por la contratación de talentos de otros países que, por contratos de término medio, en muchos casos, aceptan venir a España y mejorar de forma notable su calidad de vida. Dos posturas enfrentadas La asamblea de mañana puede ofrecer un nuevo capítulo de enfrentamientos entre los intereses privados y los públicos. Los clubes tratan de defender un mercado libre, dentro de unos límites, en busca del espectáculo y del mayor rendimiento posible para sus inversiones. La Federación Española, al amparo del Consejo Superior de Deportes, establece la necesidad de defender criterios proteccionistas sobre los jóvenes, y por ende, sobre la selección española, que se debilitaría progresivamente en el caso de que la política de los clubes fuese tendente a basar sus esfuerzos en otros mercados ajenos al español. El baloncesto español ya vivió un capítulo semejante semanas atrás, cuando se planteó la misma situación, aunque en ese caso, la defensa de los intereses particulares de las dos facciones, resultó mucho más encendida. En el caso del balonmano, da la sensación a priori de que no hay un alejamiento tan pronunciado, aunque en las horas previas, las dos partes recelan de sus respectivos postulados iniciales. Con todo, la necesidad de alcanzar un punto de acuerdo es evidente, y de una forma o de otra, al final se producirá una resolución firme al respecto. La parte del acuerdo que se refiere a los dos extranjeros es la que parece menos susceptible de modificaciones. Se ofrecen más opciones de cambio, si fuere necesario, en el apartado de los comunitarios, pero todo dependerá del talante institucional en el que se afronten las negociaciones. Está previsto que en la mañana de hoy se le dé el último retoque al documento que se habrá de presentar mañana en la asamblea, tras el cual se conocerá el marco legal en el que se estructuran las posibilidades de fichajes de cara a la próxima campaña. El mercado lo agradecerá.