El Mallorca (0-3) fue muy superior al recreativo en una final inédita de la Copa del Rey

Después de perder las finales de Copa de 1991 y 1998, a la tercera fue la vencida para el Mallorca, que no permitió que el decano, el Recreativo, pudiese soñar con el primer título de su larga historia. Para el Mallorca es su segundo título oficial, tras la Supercopa de España conseguida en 1998 frente al Barcelona, y para el joven Eto'o, uno de los partidos inolvidables de su carrera. El delantero camerunés quería homenajear a Foé con la Copa, cumplió su sueño, y hoy intentará también conquistar con Camerún la Copa Confederaciones. Aunque el Mallorca fue superior y mereció el título, la primera parte terminó con polémica, y con los aficionados y jugadores del Recreativo indignados. El árbitro, a instancias de su ayudante, el famoso Rafa Guerrero, acababa de anular un gol a Xisco, por falta, cuando el delantero del Recre había ganado en el salto a su rival y esas acciones no suelen señalarse como infracción. Desde el 1-0 y hasta la salida de Xisco el Recreativo fue totalmente dominado por el Mallorca, que pudo aumentar su diferencia si no llega a ser por Luque a dos disparos casi consecutivos de Ibagaza y el Rifle . En el descanso decayó el juego por parte del Mallorca y el Recreativo, en el partido de despedida de Lucas Alcaraz, no pudo mantener su empuje de los últimos minutos del primer tiempo. El partido no tenía un dominador claro, y se quedó sin ocasiones hasta que en el minuto 68 Molina estuvo a punto de dar el golpe tras un contraataque. El Mallorca demostró entonces tener más experiencia, consistencia y fútbol que el Recreativo. El tiempo jugaba en contra del equipo andaluz, que no tenía ninguna profundidad y sólo podía soñar con alguna contra o un despiste defensivo. Esa jugada llegó con la mencionada ocasión que no pudo aprovechar Molina, pero sólo dos minutos después Eto'o, que con su velocidad y pegada resultó decisivo. El delantero camerunés del Mallorca disparó a bocajarro ante Luque en el minuto 70, pero en la siguiente jugada recibió en largo, se marchó solo y no falló ante el guardameta. Eto'o miró entonces al cielo acordándose de Foé y la afición del Mallorca explotó de júbilo porque ese 0-2 era la sentencia definitiva. Pero Eto'o no se conformó, y cerró la final con un golazo espectacular. Eto'o cumplió en Elche su primera promesa, y hoy tendrá en la final de la Copa Confederaciones su segunda oportunidad para honrar aún más la memoria de su compañero fallecido. El equipo bermellón demostró tener más experiencia, consistencia y fútbol que el Recre