«No soy un vendedor de humo, pero lo de ascender es obligación, no objetivo»

Tantos años dando tumbos por el banquillo más goloso del país, y de buenas a primeras, las consecuencias de un doloroso proceso de reestructuración de club, le cogen de lleno y le mandan, no al paro, porque el cartel sigue veniendo, pero sí a cambiar de filosofía. Así que, cuando León le ofreció una versión blanda de la silla eléctrica decidió que era un buen momento para embarcarse en una aventura a la que solamente pondrá nota el resultado final. Y lo único que vale, cuando las sillas de madera del Palacio empiezan a sacar conclusiones, es el ascenso, que hadsta cierto punto, empieza a cobrar cariz de urgente, que ya toca. ­-¿Cuál es su primera sensación después de dar por cerrado el fichaje? -Bastante liberado, porque he pasado una racha complicada. Veía que se iba alargando mucho la rescisión de contrato con el Real Madrid, y la verdad es que la sensación de libertad tan grande que tengo ahora, me da una ilusión tremenda por empezar a trabajar ahí. -¿Por qué León? -Porque reúne todas las condiciones que yo me había propuesto a la hora de salir de un club como el Madrid. Quería ir a un sitio grande y bien organizado, y creo que León lo es. Tiene seriedad, estructura, en la LEB, si no es el mejor club, está entre los mejores y creo que tiene la idea clara y el objetivo claro, que es ganar y ascender. -¿Qué tipo de referencias tiene de la entidad? -Todos los entrenadores hablamos entre nosotros, y lo que a mí me importa más, es que me dejen trabajar, que me sienta a gusto, que pueda realizar mi labor sin problema y que me pueda sentir apoyado. León lo reúne todo en este club. -¿Se había cansado de ser segundo entrenador? -Periódicamente, si vez mi trayectoria, nunca ha hecho más de tres años en un primer equipo. Siempre ha habido pequeñas aventuras en los que estaba en filiales, y eso es una señal de que necesitaba entrenar también. Fueron tres años con George Karl, dos más en Guadalajara aunque fuera filial, tres con Obradovic, dos al filial, tres con Scariolo y ahora este parón de este año, esa ha sido mi trayectoria. Tengo muchas ganas de entrenar pero en el Real Madrid no es fácil ser segundo entrenador. Hay cosas buenas en ocupar un cargo de estas características, y hay otras que no lo son tanto. Hay que saber sacar partido a todo. -¿León va a ver explotar al verdadero Angel Jareño? -... los entrenadores tenemos todos nuestras ideas, y en un momento dado, todos las hemos aplicado, pero lo de explotar, es más bien para los jugadores. Los entrenadores nos endiosamos, y a veces oyes a algunos hablar, y parece que los protagonistas son ellos, pero nosotros somos importantes desde el punto de vista de la dirección de un grupo, pero lo que importa en realidad es el jugador. Que hagamos un buen equipo, que haya buenos jugadores, y todas esas cosas, es más importante que ninguna otra cosa. Si yo hago un buen equipo y todos juntos pensamos en lo mismo y empujamos en la misma dirección, será perfecto. No quiero importancia, todos somos importantes y de lo que se trata es de ascender. -¿El nivel de la LEB es para empezar a tener en cuenta? -Sí, la verdad es que sí. Voy a ser sincero. Yo he descubierto la LEB este año, y por el hecho de haber trabajado en ACB y Euroliga, había perdido un poco la perspectiva. El hecho desgraciado del parón de este año me ha llevado a conocer lo que no conocía. Habré visto al menos cien partidos de Liga, sin exagerar, y me ha sorprendido mucho, me ha gustado, y me apetecía entrar en esta Liga. -¿El ascenso de León es un propósito o un objetivo real? -Mira... yo creo que no solamente tiene que ser un propósito, es que todos tenemos que volcarnos para conseguirlo. Sería absurdo decir: «Vamos a ir poquito a poco, vamos a tal, vamos a cual». No soy ningún vendedor de humo, ni digo las cosas como no son. El objetivo de León es el ascenso, y no me quiero esconder. El objetivo es ese, y si no subimos, no lo habremos conseguido. -¿Cómo hay que jugar en esta categoría para subir? -Creo que la LEB es una categoría que ha ido evolucionando a mejor, se ha convertido en una competición muy rápida, y eso ya te dice la línea que vamos a seguir noostros en nuestro trabajo. Hay que jugar físico, duro en defensa, rápido y sacando el máximo rendimiento del material humano que tengamos.