La victoria de Fernando Alonso provoca el enfado de Ferrari

El presidente de Ferrari, Luca di Montezemelo, se mostró ayer crítico con su escudería, tras la debacle del domingo en el Gran Premio de Hungría de Fórmula-1 en el circuito de Hungaroring de Budapest. «Una actuación como la de ayer (domingo) no debe repetirse. Después de esta carrera, cada uno de nosotros tiene que cuestionarse, y trabajar con humildad y determinación. Quiero volver a ver en Monza una colaboración victoriosa entre Ferrari y Bridgestone (el fabricante de neumáticos japonés)», declaró Montezemolo en la sede de Maranello donde los dirigentes de la escudería, al completo, se reunieron para tratar la situación. En Hungría, el alemán Michael Schumacher, líder del campeonato, no llegó a entrar en la carrera y terminó octavo, su posición más decepcionante de la temporada, mientras el brasileño Rubens Barrichello abandonó en la vuelta 20 al perder una rueda y estrellarse contra el muro. En la clasificación de pilotos, el alemán sólo dispone de un punto de ventaja sobre el colombiano Juan Pablo Montoya (Williams-BMW) y dos sobre el finlandés Kimi Raikkonen (McLaren-Mercedes), respectivamente tercero y segundo en Budapest detrás del español Fernando Alonso (Renault). Fernando Alonso, satisfecho Doblar a Schumacher siempre es una satisfacción, confesó en la capital polaca Fernando Alonso, ganador del Gran Premio de Hungría de Fórmula 1. En la entrevista que concedió al programa Estudio Olímpico de la televisión pública polaca, Alonso aseguró que en la carrera en ningún momento se puso como objetivo doblar en la pista a un maestro como Schumacher. «Sencillamente, mi automóvil estaba perfectamente preparado, mientras que el suyo le creó problemas desde el comienzo de la prueba, se me presentó la oportunidad y conseguí doblarlo», añadió.