Moyá prosigue con su marcha triunfal por el abierto de USA

El español Carlos Moyá, séptimo favorito, siguió con su marcha triunfal en el Abierto de Estados Unidos al derrotar por 7-5, 6-4, 3-6 y 6-3 al chileno Nicolás Massu, que le permitió pasar a los octavos de final, en la que ya se encuentra su compatriota Juan Carlos Ferrero (3). Moya, de 27 años, con su saque, golpe de derecha y subidas a la red tuvo las armas perfectas para superar a Massu, que intentó imponer su ritmo, pero no lo pudo conseguir en el primer enfrentamiento de ambos. El jugador mallorquín, que disputa el octavo Abierto, llegó por tercera vez a los octavos de final, y tendrá como próximo rival al ganador del partido que disputan el checo Jirfi Novak (10) contra el marroquí Younes El Aynaoui (22). Si el rival es Novak, Moyá tiene una marca de 5-5 en los enfrentamientos con el jugador checo, mientras que si lo hace contra el marroquí le es mucho más favorable con 2-0. Moyá dominó las dos primeras mangas con dos roturas de servicio, pero en la tercera fue el jugador chileno el que lo consiguió para tener el premio a su lucha constante. Pero Moyá confirmó en la pista Louis Armstrong que estaba inspirado y decidido a ganar el partido y el cuarto juego del cuarto set volvió a romperle a Massu su saque para asegurarse el triunfo y el pase a los octavos de final. Las estadísticas del partido, que duró dos horas y 55 minutos, dejaron a Moyá con un 51 por ciento de aciertos con el primer saque, que lo transformó en una efectividad del 74, metió 15 golpes ganadores, cometió 44 errores sin forzar, por 64 para Massu, hizo 22 puntos con 28 subidas a la red y ganó un total de 129 tantos. El triunfo de Moyá dejó a España con el segundo jugador clasificado para los octavos de final después que ayer, sábado, Ferrero venció por 7-5, 7-5 y 6-1 al argentino Juan Ignacio Chela (33), mientras que Alberto Martín se enfrenta hoy con el alemán Rainer Schuettler en partido de la tercera ronda. Davenport gana con apuros La estadounidense Lindsay Davenport, cuarta favorita, tuvo que hacer un trabajo extra antes de conseguir imponerse 6-0, 6-7 (6) y 6-2 a la rusa Nadia Petrova y pasar a los cuartos de final del Abierto de Estados Unidos. Davenport, de 27 años, tuvo un comienzo arrollador en la primera manga, pero en la segunda cometió demasiados errores sin forzar y su saque no fue consistente para permitir que Petrova la llevase al «tiebreak» y lo ganase. Pero todo volvió a la normalidad en el tercer set con Danveport cruzando la pelota a ambos lados del campo que le aseguraron los puntos suficientes para asegurarse la victoria y continuar con las aspiraciones de luchar por el título de campeona, que ya ganó en 1998 en su octava participación en el último torneo de Grand Slam del circuito profesional. «Perdí la concentración en el segundo set y además ella comenzó a jugar muy bien», declaró Davenport. «Después de haber comenzado perfecto pensé que podía ganar más fácil, pero al final lo importante es que conseguí la victoria y sigo en la competición». Según la situación del cuadro, Davenport, de llegar a las semifinales, tendría que enfrentarse a Clijsters, pero dijo que ahora es algo que no le preocupa. «Lo primero que tengo que hacer es ganar a mi próxima rival y luego pensar en las semifinales», comentó.