La delegación española cumple los pronósticos en los Mundiales pero sin medallas

El remo español cumplió los pronósticos más optimistas en los Mundiales de Milán 2003, que finalizaron ayer, al clasificar a cuatro embarcaciones para los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, aunque no pudo añadir a su buena actuación el premio de las medallas. Sin en los Mundiales de Sevilla del pasado año España se aprovechó de jugar en casa para sumar tres metales (una plata y dos bronces), en Milán el podio quedó muy lejos para la mayoría de los botes y tan sólo el skiff ligero de Lourdes Guillén rozó la proeza. La sevillana buscaba convertirse en la segunda española en lograr una medalla en categoría sénior en una competición de alto nivel, tras el bronce que logró Teresa Mas de Xaxars en Sevilla, y durante tres cuartas partes de la carrera acarició el metal. En los últimos 300 metros, a Guillén le fallaron un tanto las fuerzas y perdió un podio que casi era suyo. La remera sevillana disputaba, por tercer año consecutivo, una final de un Mundial, y una vez más se quedó a las puertas del éxito.