España hace acopio de autoestima a base de calidad y puntería

España completó el mejor partido de la era Sáez, ganó con solvencia a una triste, dura y decepcionante Portugal después de cinco empates consecutivos entre vecinos y, lo que es más importante, recuperó la autoestima a cuatro días de recibir a Ucrania y con la repesca para la Eurocopa en el horizonte. La única pena, que Torres, en el 45, y Xabi Alonso, en el 89, se retiraron con un tobillo renqueante. La selección también se reencontró con el gol, el buen gusto por el fútbol, y desnudó de cabo a rabo a una Portugal que mucho debe de mejorar si quiere hacerse fuerte en su Eurocopa. Bien es cierto que a Scolari le faltaban titulares como Quaresma y Cristiano Ronaldo, ausentes por actuar el viernes con la sub-21 frente a Turquía. Justo en el momento en el que afloran los nervios en el seleccionador y la clasificación para la Eurocopa se complica, Iñaki Sáez decidió arriesgar. Hizo unos experimentos que, salvo la portería, afectaron a todas las líneas del equipo y le salieron de maravilla. A mitad de ciclo, a medio camino entre el estreno del técnico vasco y el arranque del Europeo, España pudo encontrar al fin un equipo tipo, un estilo de juego definido más allá del dibujo 4-2-3-1 al que Sáez permanece fiel. Atrás es donde, pese al triunfo, no se disipan las dudas. Eso sí, Salgado, soberbio, siempre pudo con Figo y es indiscutible. Sáez ensayó con una nueva pareja de centrales, bien es cierto que por culpa sobre todo de las lesiones, la última la del cántabro Helguera. Juanito y Marchena no parece un tándem sobresaliente, pero tampoco sufrieron demasiado ante los veteranos Rui Costa, Pauleta y compañía. Más aún sorprende que Puyol ejerza como lateral zurdo. Y no porque el catalán, como dejó patente ante los lusos, no funcione en cualquier demarcación, sino porque ello desprestigia a todos los laterales izquierdos españoles.¿Cómo se sentirán ahora los Raúl Bravo, Juanfran, Romero o Aranzábal? ¿No sería mejor probar a zagueros zurdos que despuntan como el sevillista David o el mallorquinista Poli? En el eje del centro del campo, Xabi Alonso y Baraja protagonizan la nueva apuesta. Es una pareja excelente, equilibrada y compensada. Además de jugar bien, el donostiarra es inteligentísimo y mide como nadie los tiempos del fútbol. Se junta a los centrales cuando debe y se estira cuando el equipo se lo demanda. Con él, Baraja, más llegador, se siente comodísimo. España bailó literalmente a una decepcionante Portugal en el primer tiempo. Tocó mucho y bien, tuvo desparpajo. Buena noticia.