La portentosa labor de Pau Gasol pone fin al viejo mito de Rusia

Una portentosa exhibición de juego, fuerza y eficacia, un festival de baloncesto, una clase práctica de fundamentos... ¡Un gustazo! Pau Gasol derrumbó en quince minutos a la temible Rusia. El ala-pívot español llevó las riendas de una victoria espectacular de España que se tornó sobria por dos minutos finales de despistes, justo en uno de los ratitos en los que la estrella del equipo nacional no estuvo en la pista. La selección apabulló a su rival, le dejó sin recursos en quince minutos de juego espléndido, demoledor, brillante y espectacular. La lástima fueron dos minutos desafortunados que convirtieron una renta que rondaba la veintena de puntos en sólo doce. Si esa diferencia se hubiera mantenido, la selección sería hoy virtual campeona de grupo. Con sólo la docena de tantos a su favor, una derrota por 10 puntos con Serbia le llevaría al segundo puesto. El muchacho del Memphis Grizzlies parecía ávido de demostrar quién iba a mandar en el partido. Vio el día anterior a su amigo Kirilenko, pero no se amilanó. Así, casi sin despeinarse, firmó ¡16 puntos! en el primer cuarto. Sólo erró tres tiros en juego y uno desde la línea de personal. La selección encarrilaba el triunfo: 15-31. Sería injusto hacer entender que el gigante de Sant Boi estuvo solo. España cuajó un comienzo de partido sensacional: Calderón dirigió con maestría, Navarro encestó con su habitual desparpajo, y Garbajosa se empleó a fondo para frenar a la estrella rival. Como Jiménez estaba allí para corregir pequeños defectos y ayudar atrás, la selección era una máquina perfecta de juego y espectáculo. La defensa era soberbia. Los rusos no encontraban la fórmula para aprovechar debilidades de España. No las había. Otro festival El segundo cuarto continuó siendo un festival del equipo nacional y la capacidad de Gasol parecía ilimitada: canastas de gancho, 'mates' demoledores y, para concluir, exhibición de tiro a cuatro o cinco metros del aro. ¡31 puntos antes del descanso! Inaudito, increíble... Para no olvidar. En ese segundo cuarto -15 puntos- Gasol no erró una sola vez. Todo lo que llegó a sus manos lo rentabilizó con tantos para su equipo. Con diez puntos de ventaja (31-41) no estaba garantizada la victoria para España. Moncho López, que tiene perfilado su quinteto titular, volvió a emplear a los mismos hombres que borraron de la pista a Rusia durante los dos primeros cuartos, mostrando un sentido común que puede eternizarle en este equipo a poco que acompañen los resultados. Navarro empezó a acaparar protagonismo ofensivo. . España se paseó,. España se jugará la primera plaza del Grupo C, lo que supondría la clasificación directa para la fase final del Europeo 2003 sin necesidad de intervenir en una eliminatoria previa, con la posibilidad de conseguirlo aunque perdiese frente a Serbia y Montenengro, si la diferencia no supera los nueve puntos. El colchón de seguridad con el que cuenta la selección nacional obedece a la ventaja lograda por Rusia sobre los serbo-montenegrinos (80-95) y la alcanzada sobre los rusos (77-89), lo que sitúa a los ex soviéticos con +3 puntos en los desempates y, a falta del choque contra los plavi, a España con +12 y los ex yugoslavos con -15. Todo está de cara este año.