OPINIÓN
Imparable Gasol
LA RÁPIDA diferencia que obtuvo España, gracias al extraordinario acierto de Gasol y Navarro en el primer cuarto, condicionó al desarrollo del partido. Moncho López no necesitaba introducir modificaciones porque todo iba sobre ruedas, y era Sergei Elevitch quien debía cambiar el ritmo del encuentro. El preparador ruso lo intentó retirando pívots y situando en cancha, durante muchos minutos, un quinteto con cinco hombres exteriores. Cuando se sentó Pau, fue Navarro y luego tomó el relevo Carles Marco. Lástima que España pecara de optimista cuando tenía el primer puesto casi hecho, con una diferencia de más de veinte puntos. Los cambios acabaron por descomponer al equipo.