Envalira corona como escalador a Valverde y Nozal se reafirma

Alejandro Valverde, un chaval murciano de 23 años, el mejor aficionado del ciclismo español hace dos temporadas, sorprendía a Darío Frigo y al resto de favoritos en la cumbre de Envalira, donde los escaladores confirmaron, en la carretera, que su reino no es de este mundo. Lo de romper una carrera de lejos es algo que queda para los anales del ciclismo, para otros tiempos de este deporte. Y lo de atacar en los kilómetros finales se sigue llevando, pero en Envalira entró un grupo de treinta corredores y acabó ganando uno de esos ciclistas que está destinado a escribir una parte de la historia de este deporte. En Andorra inició su asalto a la cumbre del ciclismo. Los 2.400 metros de altitud parece que nos afectan a la hora de ordenar las ideas sobre una de esas etapas en las hubo leña y ataques desde la salida y en la que se han confirmado un nuevo grupo de corredores. Podríamos empezar por Alejandro Valverde, que lleva una temporada de enmarcar. Murcia ya tiene otra figura de verdad, fraguada con triunfos. Pero tampoco podemos dejar de lado a Isidro Nozal, que más que fuerte se puede decir que es un prodigio de la naturaleza físicamente. Es una antiestrella que te da unas respuestas que son capaces de tumbar cualquier entrevista. Conservó el jersey oro, aumentó su ventaja sobre su compañero Igor González de Galdeano y Manuel Beltrán. Volvió a salirse. Tiene un castellano muy claro, vamos que se le entiende todo a la primera. «Hoy (por ayer) me han dado mas hostias en el carné de identidad que en toda mi vida» decía en la cumbre de Envalira, donde ha terminado por ganarse el respeto de todo el pelotón. Volvió a trabajar a destajo, como todo el equipo de la Once-Eroski; saltó a por Roberto Heras, a por Aitor González, estuvo junto a Igor González de Galdeano. Heras, sin confianza «Nozal va ganando enteros para ganar la Vuelta. Nos ayudamos, me da tranquilidad. Es un candidato para poder ganar esta Vuelta. Se entrega totalmente para el equipo. Es difícil hablar mal de Isidro. ¿Qué voy a decir yo?» comentaba Igor González de Galdeano. Mantiene Nozal que «Igor sigue siendo el líder del equipo, como se ha visto». Está contento de líder, se siente a gusto y comenta que «para mí es más importante la familia que el ciclismo». La tercera jornada seguida en los Pirineos no aportó nada nuevo a una general en la que Isidro Nozal e Igor González de Galdeano salen fortalecidos, lo mismo que Manuel Beltrán. Roberto Heras atacó, pero se le veía que no creía mucho en sus posibilidades. No eran latigazos fuertes, de los que ha dado en otras ocasiones. El Heras de esta Vuelta a España no es el mismo corredor que hemos visto otros años. En la meta asomaron la realidad, la crudeza de los tiempos.