Armstrong tiene un amiguito

Lance Armstrong podrá afrontar con una cierta tranquilidad su intento de conseguir ganar su sexto Tour de Francia consecutivo frente a un recorrido que no tiene la dureza de los últimos años, al menos en cuanto a llegadas en alto, pero que a su vez puede resultar bastante complicado. Jean Marie Leblanc, director general de la carrera, presentó una prueba que puede resultar complicada y que va a tener una novedad importante, la cronoescalada a Alpe d'Huez, inédita en la carrera, con 15 kilómetros de ascensión. Lance Armstrong, Jan Ullrich e Ibán Mayo, entre otros, estuvieron en la presentación de un Tour que va a tener las siguientes líneas maestras: saldrá de Lieja el 3 de julio para finalizar en París el 25 del mismo mes después de un prólogo, veinte etapas y 3.429 kilómetros. Hay seis etapas que se pueden considerar de montaña, pero sólo tres de ellas terminarán en alto: dos en los Pirineos, La Mongie y Plateau de Beille, y la citada cronoescalada a Alpe D'Huez. Hay otras cuatro jornadas de montaña que no tendrán final en una cima. Además, de los 146 kilómetros contrarreloj previstos, sólo 60 van a ser una contrarreloj individual, que se sumarán a los 6 kilómetros del prólogo. La contrarreloj por equipos, en la cuarta etapa, Waterloo-Wasquehal, con 65 kilómetros, volverá a resultar decisiva. La novedad son esos 15 kilómetros de cronoescalada en Alpe d'Huez, que además de ser novedosos van a resultar determinantes en un Tour que va a concentrar todos sus esfuerzos en la semana final de la prueba. A falta de lo que pase en el momento de la verdad, en el Tour 2004 parecen más decisivas las contrarrelojs que la montaña. El Tour, a pesar de algunos ligeros retoques, mantiene un trazado bastante clásico. En esta ocasión, en las ocho primeras etapas, totalmente planas, sólo estará situada la contrarreloj por equipos. Se pasarán los Pirineos antes de la primera contrarreloj, que en esta ocasión será una cronoescalada, mientras que la crono plana llegará el penúltimo día. En los Pirineos habrá dos etapas, ambas con finales en alto, La Mongie, y Plateau de Beille. La entrada en los Alpes tendrá lugar con el final en Vilar-de-Lans, después de seis puertos, alguno de ellos complicados, que se harán duros, pero sin grandes nombres. Luego llegará la cronoescalada de Alpe D'Huez, antes de la etapa reina en los Alpes, entre Bourg d'Oisans y Le Grand Bornand. Quedará otra jornada alpina, entre Annemasse y Lons-le-Saunier. Al Tour 2004 le faltan puertos importantes, etapas de gran montaña. Se puede hablar, más que nunca, de que el enfrentamiento entre Lance Armstrong y Jan Ullrich está servido.