Nueve meses para una edición diferente

DEL TOUR 2003 lo más sensato que puede decirse es que resulta extraño en su concepción. Dentro de unos parámetros más o menos clásicos, habituales en la prueba francesa, en el Tour 2004 se nota la falta de gran montaña, por un lado, tanto en los Pirineos como en los Alpes, además de más llegadas en alto. Por si todo eso no fuera suficiente, la situación de las contrarrelojs también resulta sorprendente. Después de la crono por equipos, en la cuarta etapa, bastante larga y selectiva, aunque los organizadores quieren introducir alguna novedad para que las diferencias no resulten importantes, habrá que esperar a pasar los Pirineos, primero, y a la primera etapa alpina para afrontar una cronoescalada en Alpe D'Huez. Con esa concepción de carrera, la contrarreloj por equipos va a ser muy importante. A diferencia de otros años, la parte más decisiva del Tour se encuentra situada en la dos semanas finales de la prueba. Dentro de esas dos semanas, sobre todo en la última, con una cronoescalada, una contrarreloj individual y todos los Alpes, que aunque estén un poco descafeinados y le falten puertos importantes siguen siendo los Alpes. El Tour, a pesar de algunos ligeros retoques, mantiene un trazado bastante clásico. En esta ocasión, en las ocho primeras etapas, totalmente planas, sólo estará situada la contrarreloj por equipos. Se pasarán los Pirineos antes de la primera contrarreloj, que en esta ocasión será una cronoescalada, mientras que la crono plana llegará el penúltimo día. Esa situación estratégica de las dificultades va a cambiar la forma de correr y debe de abrir el abanico de posibilidades de algunos corredores que buscarán el aprovechar las debilidades de los dos grandes favoritos de la prueba, Armstrong y Ullrich. El Tour 2004 se le va a hacer largo a muchos corredores del pelotón que inicien su andadura en la ronda gala. A nivel de participantes hay que pensar en los nombres de 2003 y su estado de forma este año, más Joseba Beloki e Igor Gozález de Galdeano. Con tres llegadas en alto, en las contrarrelojs se puede contrarrestar lo que se pierda en las cimas. Lance Armstrong y Manuel Saiz, entre otros, piensan que la labor de equipo va a resultar fundamental. En ese apartado, tanto el US Postal (Armstrong), Telekom (Ullrich) y la nueva firma que sustituya a la Once-Eroski (Beloki e Igor González de Galdeano) tiene mucho ganado. En un Tour, el de 2004, distinto en muchos de sus apartados a lo que estábamos acostumbrados otros años, sabemos el trazado, pero nos queda por ver el estado de forma en el que se presentarán los grandes favoritos, Lance Armstrong y Jan Ullrich, y para eso nos faltan todavía nueve meses.