Flores deja muy tocado y en el último puesto a «su» Espanyol y a Javier Clemente (0-2)

Paco Flores, el técnico que llevó al Espanyol a la conquista de la Copa del Rey como culminación del centenario del club, regresó ayer a la que denomina «su casa», el estadio Lluís Companys, en calidad de responsable del Zaragoza y lo hizo para hundir todavía más en la cola de la clasificación al conjunto catalán y dejar así en una más que difícil situación a su homólogo Javier Clemente. Los españolistas, en inferioridad numérica durante buena parte del segundo tiempo por expulsión de Angel Morales, llegaban a este partido tras sumar su primera victoria en la pasada jornada ante el Racing de Santander (0-1), pero los zaragocistas lo hacían también tras obtener un brillante empate frente al Real Madrid y se demostró que este segundo referente era de más valor que un triunfo en El Sardinero confirmado ahora como flor de un día. Javier Clemente vio como su continuidad en el cargo volvía a pender de un hilo cuando ambos equipos estaban todavía en fase de tanteo, momento en el que Galletti se hizo con un balón en el interior del área, que controló en primera instancia para rematar de chilena e inaugurar el marcador transcurridos tan sólo once minutos de juego. El Zaragoza, aunque más conservador a partir del gol, era el que mostraba más ideas sobre el campo, mientras que todas las bazas españolistas pasaban por el pundonor y el empuje de sus jugadores. El Zaragoza tardó poco en hacerse con el control del partido hasta el punto de aumentar su ventaja en el minuto 23, cuando Alvaro batió a Lemmens. El equipo catalán, pese a la expulsión de Morales, se volcó como mejor pudo en ataque pero, se consumó la derrota.