«No he venido para pasar el rato»

El fichaje estrella del verano ha perdido su condición de tal con el paso de los tres primeros meses de competición. De la expectativa de un buen jugador, que mejoraría la calidad del resto de la plantilla, se ha pasado a un tercer central de lujo, que no sólo no juega: ni siquiera entra en convocatoria en buena parte de los últimos compromisos. -Seguro que lo que usted se esperaba de su experiencia en España no tiene mucho que ver con todo ésto. ¿Cómo se encuentra? -Me siento bien, me siento tranquilo, contento dentro de lo que puede decirse, intentando aprender todo lo que puedo de español, adaptándome a las costumbres y al modo de vida de España, a la comida, y la verdad es que en León se vive bien. Lo de la Liga ya es otra cosa. Es una competición muy buena, muy fuerte, pero aquí hay que jugar al 100% en todos los partidos. Yo venía acostumbrado a una competición que te exige eso contra cinco o seis equipos, no contra prácticamente todos, y eso se nota. Pero de verdad que estoy contento, y que pienso que la forma de vida y la filosofía de la ciudad, del club y de la Liga, me gusta. -¿Por qué cuesta tanto a los extranjeros adaptarse a la forma de jugar de la Liga Asobal y de Ademar? -No me parece que sea tan difícil adaptarse, pero sí que depende mucho de la mentalidad con la que vengas a esta competición. Para mí es un poco duro. En Eslovenia se trabaja con más calma. En España todo es «caliente» y todo es temperamental, si se puede decir así. Juegas los partidos y la gente grita, anima, chilla, empuja... Eso no es muy común por ahí, pero cada vez me encuentro mejor, ya sé cómo son las cosas por aquí, y ya sé lo que me toca. Soy un jugador joven, tengo 23 años, y para una persona de mi edad, en cualquier tipo de trabajo, venir a un país nuevo es complicado. Más todavía cuando eres el central del equipo y tienes que pensar un poco en lo que vas a hacer con el resto del equipo. Tienes que recoger mucha información para cada partido, para cada situación, y no es fácil. -¿Nota mucho la diferencia de formas de entrenamiento entre León y Ljubliana? -Lo que más cambia es la dureza de los entrenamientos. Por ejemplo, después del partido del domingo, allí se jugaba al fútbol, o al baloncesto, y muchas veces, durante la semana, también se hacía eso. Aquí no, aquí estás a tope durante toda la semana y luego juegas el partido a tope. Los entrenamientos de la mañana que estamos haciendo aquí, no habían sido tan duros en toda mi carrera deportiva, pero también sé que quiero mejorar, y que estoy en un sitio donde cada día me estoy haciendo mejor, más fuerte y más duro, y la verdad es que aunque hay muchas diferencias, no me importa, me estoy adaptando bien. -Lo que no se le pasaba por la cabeza, seguramente, era jugar tan pocos minutos como los que está teniendo ¿no? -Normal, eso es normal. Yo antes me pasaba la vida en la pista y ahora casi no la toca. Es normal pensar que vas a jugar más. El año pasado jugué mucho, en la Liga de Eslovenia y en la competición europea. Eso me ha hecho plantearme muchas veces qué es lo que pasaba, qué es lo que no funcionaba, o por qué no estaban saliendo las cosas bien, pero me di cuenta de que no era una buena filosofía y que todo tiene una parte positiva. Mi novia está conmigo, me ayuda mucho, me dice que no me preocupe, y además, cuando te sientes acompañado, parece que siempre se ven las cosas de otra manera. Así que, aunque siempre quieres jugar, lo que me interesa de verdad es seguir progresando en la medida de mis posibilidades en los entrenamientos y esperar a que me llegue mi oportunidad, que seguro que antes o después la voy a tener. -¿Ha pensado en tirar la toalla en algún momento? -Cuando quieres jugar y no lo consigues, siempre tienes cinco minutos malos en los que se te pasa por la cabeza de todo, y que no se puede seguir así, que es mejor dejarlo todo y volver a casa. Pero luego, le das la vuelta y piensas que lo mejor que se puede hacer es entrenar muy fuerte y cambiar las cosas para demostrar a todo el mundo que realmente puedo jugar a balonmano en España. Me siento bien con mis compañeros, me gusta el ambiente que tiene este equipo, y creo que estoy en una situación que debo aprovechar. -Y si le llega una oferta, ¿que haría? -Eso no está en mis manos, eso es asunto del club. Es difícil saber. No sé lo que piensa el club respecto a mí, y sería asunto de ellos, sobre todo del entrenador. Creo que tengo un sitio en esta Liga y he venido a un club grande a triunfar, no simplemente a pasar el tiempo.