Los equipos leoneses regresan a la competición con bríos renovados

El paréntesis competicional parece que ha sentado bien a los equipos leoneses que militan en el grupo VIII de Tercera División, al no haber sufrido ninguna derrota en su vuelta a la actividad. El Promesas Ponferrada sufrió más de lo esperado para doblegar al Sporting Uxama, viéndose obligado a remontar en dos ocasiones para terminar alzándose con un triunfo que le otorga los tres puntos y le permite recuperar la tercera posición en la tabla clasificatoria, aunque podría perder la misma si el Guijuelo se impone el próximo jueves al Atlético Tordesillas en el partido correspondiente a la decimocuarta jornada suspendido en su día por la lluvia, rival ante el que tendrá la oportunidad de volver a asentarse en la tercera plaza si es capaz de derrotarle el próximo domingo a domicilio, en un partido clave para el futuro más inmediato del conjunto ponferradino en la competición. La Cultural B dio la campanada de la jornada al imponerse con autoridad a un sorprendido Real Ávila que se vio impotente para superar el entramado defensivo montado por el filial culturalista, poniendo fin a cuatro jornadas consecutivas sin conocer el triunfo, en las que sólo fue capaz de sumar dos de los doce puntos posibles. Esta victoria permite al equipo leonés huir de la quema y acercarse de nuevo a los puestos intermedios de la clasificación. La SD Hullera derrotaba con solvencia al Benavente en un partido que en el minuto dieciséis ya lo tenía sentenciado, comenzando a poner tierra por medio con los puestos de alto riesgo, a pesar del triunfo conseguido por el Santa Marta salmantino, que minimizó un poco la victoria hullerista. El próximo domingo se desplaza a tierras sorianas para enfrentarse al Sporting Uxama, un rival directo en la lucha por la permanencia y que en las últimas jornadas parece que comienza a despertar a pesar de los resultados adversos. La Bañeza y el Atlético Bembibre dirimieron un derbi en el que no hubo ni vencedores ni vencidos, al concluir el mismo con empate a un gol, un resultado que no le sirve a ninguno de los dos contendientes, aunque les otorga un pequeño margen de confianza a la hora de acercarse a sus respectivos objetivos. Así, el conjunto bañezano se mantiene en tierra de nadie , teniendo el próximo domingo una cita importante en Benavente, con la que despedirá el año. El conjunto rojiblanco sigue luciendo el farolillo rojo del grupo, debiendo recibir el próximo domingo a un cabreado Real Ávila que tratará de resarcirse de la derrota sufrida frente a la Cultural B para no descolgarse de los puestos de privilegio. «Supimos jugar una primera parte con cabeza y, sobre todo, sentido» BELARMINO LÓPEZ Entrenador de la SD Hullera